La Vanguardia publicó el domingo una entrevista de dos páginas a Pablo Iglesias. Dos páginas completas dan para preguntar sobre muchos asuntos -los Presupuestos, la clase empresarial, incluso de la hipotética moción de censura en la Comunidad de Madrid, en la que, por cierto, Podemos tiene poco o nada que decir, pero, al parecer, no hay espacio para abordar la imputación del partido por su presunta financiación irregular. Increíble.

Recuerden que la sola imputación del PP propició la moción de censura que echó a Mariano Rajoy de La Moncloa. Ahora, al parecer, la imputación de Podemos, que forma parte del Gobierno, no lo olvidemos, no es relevante.

Por su parte, el vicepresidente segundo no se sale del guion y habla de la derecha oscura, de los empresarios corruptos, de la foto de Colón, del diálogo con todos, incluso con Junts, y, por supuesto, de los escraches en su casa de Galapagar.