• La filial española reducirá su plantilla a un ritmo de 1.500 personas/año al prolongar su Plan de Suspensión Individual.
  • Un plan de bajas destinado a los trabajadores mayores de 53 años, con más de 15 años de antigüedad.
  • Buenas condiciones: casi el 70% del salario, cotización a la Seguridad Social y seguro médico privado.
  • Y además, posibilidad de trabajar en otra empresa, eso sí, que no sea competencia directa de la operadora.
Telefónica de España apostó en 2016 por reducir plantilla -sin líos laborales de por medio- y cerró el año con 26.000 empleados. Una cifra que seguirá bajando, hasta situarse en unos 23.000 en 2019. Por tanto, este año y el próximo, la filial española de Telefónica reducirá su plantilla a un ritmo de 1.500 personas anuales, tras prolongar su Plan de Suspensión Individual (PSI) hasta diciembre de 2018. Es un plan de bajas voluntarias e incentivadas, claro está, destinado a los trabajadores mayores de 53 años, con más de 15 años de antigüedad en la operadora. Las condiciones del plan de bajas son buenas: los empleados que se apunten recibirán casi el 70% del salario, mientras Telefónica seguirá cubriendo su cotización a la Seguridad Social y su seguro médico privado. Además, está la posibilidad de trabajar en otra empresas, eso sí, que no sean competencia directa de la teleco. Una reducción de plantilla que no es baladí. Y es que supondrá que en 2019 la filial española de Telefónica tenga sólo un tercio de los empleados con los que contaba en 1995 (unos 70.000). Cristina Martín cristina@hispanidad.com