• Acuerdo con el Estado de Wisconsin: retira la demanda por la cancelación de contratos tras recibir un pago de 8,5 millones de euros.
  • Sin embargo, la cotización de la empresa familiar que preside Carlos Palacio Oriol acumula una caída cercana al 40% desde su debut.
  • En su estreno bursátil, el pasado 7 de mayo, sus acciones tenían un valor de 9,25 euros, pero ahora se sitúan en torno a los 5 euros.
Talgo ha logrado resolver sus problemas en EEUU, según ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Una alegría que sin embargo no ha afectado de forma positiva a su cotización: sigue sin levantar cabeza en bolsa, pues no parece gustar a los inversores. Nos centramos en primer lugar en el frente estadounidense, pues la empresa familiar que preside Carlos Palacio Oriol (a la derecha de la imagen) por fin ha podido enterrar el hacha de guerra. En concreto, ha alcanzado un acuerdo con el Estado de Wisconsin y retirará la demanda interpuesta por la cancelación de los contratos de compra y mantenimiento de dos trenes Intercity, tras recibir un pago de 8,5 millones de euros. Esta cifra es ni más ni menos que los dos pagos restantes del contrato firmado en la segunda mitad del 2009. Tras la 'paz' alcanzada, Talgo seguirá siendo la propietaria de los dos trenes, pero cuando se los venda a un tercero deberá pagar al Estado de Wisconsin un 30% del precio neto de venta. Otra opción que tendría el fabricante de trenes sería alquilarlos en 'leasing' (es decir, con derecho a compra) y sólo debería pagar un 10% del alquiler anual. Además, los pagos al Estado de Wisconsin nunca superarían los 8,5 millones. Pasamos ahora a otro asunto que no permite a la empresa familiar que preside Carlos Palacio Oriol sonreír de oreja a oreja. Y es que su cotización acumula ya una caída cercana al 40% desde su debut, que tuvo lugar el pasado 7 de mayo. De hecho, en su estreno en el parqué, sus acciones tenían un valor de 9,25 euros y ahora se sitúan en torno a los 5 euros. A media mañana de este viernes, su cotización caía un 5,01%, hasta los 5,576 euros, es decir, un 39,78% inferior a la de su debut. Finalmente, terminó la sesión de este lunes negro bursátil con una caída del 7,24%, hasta los 5,445 euros, por lo que ya ha perdido un 41,14% de su valor. Sin embargo, este hecho no es nuevo, pues Talgo parece no gustar a los inversores ni a los especuladores. Hace justo un mes presentó sus resultados semestrales, en los que ganó 23,5 millones ( 57,4%), pero su valor presentó una caída acumulada superior al 25%: en concreto, las acciones de Talgo cerraron a 6,40 euros, tras caer un 3%, un 30,8% menos respecto a los 9,25 euros de su debut bursátil. Pero la pérdida de valor se observó apenas cinco después de su estreno bursátil, cuando la cotización bajó un 13,5%, lo que parece demostrar que saltar al parqué quizá no fue una buena opción. Paralelamente, no podemos olvidar que Talgo tiene dos grandes problemas encima de su mesa: la sucesión -como en toda empresa familiar- y que además es una empresa monocultivo -dedicada sólo a trenes de alta velocidad (AVE) junto a la canadiense Bombardier-. Para este último asunto, lo mejor sería que el gran constructor ferroviario español e inventor del Talgo optara por diversificarse y fabricar también trenes de Cercanías y de Mercancías. Cristina Martín cristina@hispanidad.com