Según una encuesta de NC Report para La Razón,  el peculiar y ‘feudal’ sistema de reparto de escaños, permitiría al bloque secesionista ver ampliada su presencia en el Parlament de Barcelona en dos escaños a pesar de incrementar sus votos en apenas un 0,2% de los sufragios válidos.  En concreto, compuesto por la antigua Convergència, Esquerra y las CUP, el bloque secesionista pasaría del 47,5% al 47,7%.

Por otra parte, de ser primera fuerza con 34 escaños, PDeCat pasa a ser segunda (tras ERC) perdiendo 3 escaños y quedándose en 31.

Por su parte ERC adelanta a los de Quim Torra y sube hasta los 35, y se convierte en primera fuerza.

Ciudadanos pasa de ser primera fuerza política con 36 escaños a tener 16.

El PP aumenta su representación en el Parlament desde los 4 diputados que obtuvo en diciembre de 2017 (su peor resultado histórico) hasta los 10 escaños.

Reseñable es también la entrada en el Parlament de Vox, que recabaría la confianza de 200.000 catalanes, lo que le daría derecho a 3 escaños.

Es pertinente comparar los resultados de este partido con los de las CUP: la formación de extrema izquierda tendría 20.000 votos menos que Vox pero lograría el doble de escaños, 6 frente a 3.