El banco francés Société Générale no es una excepción y llevará a cabo un ajuste de plantilla que afectará a unos 1.600 trabajadores en todo el mundo, aunque el ajuste más duro se realizará en Francia, donde dejarán la entidad 750 trabajadores como consecuencia, principalmente, de la reorganización estratégica de su negocio de banca de inversión. En España, donde el grupo cuenta con algo menos de 800 empleados, el ajuste será "mínimo", según la propia entidad. El objetivo del banco, naturalmente, es mejorar la rentabilidad.

El futuro de Société Générale pasa por afianzar su liderazgo en el negocio mayorista, tanto en Europa como en los mercados donde cuenta con ventajas competitivas sostenibles y diferenciadoras. Por el contrario, la entidad planea cesar su actividad en el área de materias primas y clausurar su filial de negociación por cuenta propia. Al mismo tiempo, el banco pretende optimizar su cartera de clientes y su presencia geográfica combinando sus negocios de relaciones con clientes, banca de inversión y financiación.