• Es, precisamente, una de las que más actuaba históricamente en España.
  • Gas y Electricidad, la otra gran división que no ha cumplido las expectativas.
  • El grupo pretende reducir costes en 1.000 millones de euros.
  • La plantilla teme una oleada de despidos, al menos en Alemania.
  • El presidente se reunirá con los representantes laborales la semana que viene.

Malos tiempos para Siemens. Durante el primer trimestre de su ejercicio fiscal -de octubre a diciembre- ganó 1.079 millones de euros, un 24,8% menos que un año antes, y eso que mejoró la facturación un 5%, hasta los 17.417 millones de euros, gracias al tipo de cambio.

Aunque los pedidos del grupo cayeron un 11% respecto al año anterior, el presidente de Siemens, Joe Kaeser (en la imagen), ha asegurado este martes que "el resultado de la mayor parte de las áreas de negocio se situó dentro de nuestras expectativas".

Expectativas que no ha cumplido una de las divisiones más importantes de la multinacional: la de Salud, que aporta el 23% del negocio del grupo. "Algunas divisiones proporcionaron un resultado excelente, pero Healthcare (Salud) necesita acelerar sus esfuerzos para volver rápidamente a su anterior rendimiento", ha señalado Kaeser.

Precisamente, la división de Salud es una de las que más presencia ha tenido históricamente en España. Sin embargo, la falta de inversión pública durante la crisis, ha golpeado seriamente la cuenta de resultados de la compañía en nuestro país.

La otra gran división que se ha quedado lejos de cumplir las expectativas ha sido la de Gas y Electricidad, que en 2014 aportó el 24% del Ebit del grupo. Sin embargo, en este caso, Kaeser se ha mostrado más comprensivo: "Necesita -esta división- un concepto más amplio para volver, a largo plazo, a los márgenes históricos". Efectivamente, la compañía contaba con que la bajada del precio del petróleo iba a influir en su división de Gas y Electricidad.

Ante el recorte del negocio, la multinacional se ha planteado la reducción de costes por valor de 1.000 millones de euros. La cifra es elevada y ha hecho saltar las alarmas entre los empleados, que temen una oleada de despidos, al menos en Alemania. Ante esta situación, el propio Kaeser ha anunciado durante la junta general de accionistas, celebrada este martes, que la próxima semana se reunirá con los representantes de los trabajadores. De momento, no hay nada sobre la mesa. Sólo son rumores. Pero cuando el río suena…

Pablo Ferrer

pablo@hispanidad.com