• A las pérdidas en el primer semestre tras la fusión (135 millones) sigue un duro correctivo en bolsa (más del 7%).
  • El principal problema es el parón de pedidos en India, que se retrasa más de lo previsto.
  • El recorte de plantilla (22%) coincide con la profunda reestructuración en la matriz germana.
Los malos resultados entre abril y septiembre de Siemens Gamesa provocan, este martes, un serio correctivo en bolsa (cae en torno al 8%), pero no sorprenden: son dos realidades entrecruzadas que muestran el mal momento de la empresa, que a mediados de mayo cotizaba a 21 euros y ahora se acerca, de nuevo, a los 11. Siemens Gamesa no despega, por el parón de los pedidos en India, que se retrasa más de lo previsto, ni explica cómo va a capear la tormenta, tras aplazar su plan estratégico hasta febrero. Eso y muchas dudas es lo mismo. Y a eso se une el anuncio de un recorte de la plantilla del 22% (6.000 despidos), lo que entra dentro del capítulo del objetivo de sinergias esperadas de la fusión (cifradas en 230 millones), que tampoco están claras. Parece, en fin, una operación orquestada en la que coinciden la profunda reestructuración de la matriz, la alemana Siemens, y la crisis de credibilidad de su filial eólica, tras dos profit warnigs en menos de cinco meses. Y a las dudas se unen, no sólo los malos resultados del primer semestre de la sociedad fusionada -con unas pérdidas de 135 millones y una caída en las ingresos por ventas del 12,3% (5.022 millones de euros)- y el anuncio de un recorte en la previsión de ventas para 2018 del 18% (de casi 11.000 millones a entre 9.000-9.600 millones). Rafael Esparza