Ana Botín ha sorprendido este lunes al mercado con la compra de 3,2 millones de acciones del Banco Santander, por 12,1 millones de euros. Doña Ana posee el 0,161% del banco frente al 0,142% que tenía antes de la operación, lo que le convierte en el miembro del Consejo con mayor porcentaje de la entidad a título personal. Hablamos de 26,8 millones de acciones con un valor de mercado que supera los 100 millones de euros.

Ahora bien, no es Ana sino su hermano Javier el miembro de la familia Botín que ostenta una mayor participación del banco, según los registros de la CNMV: el 0,562%, eso sí, de manera indirecta. Y es que, además de consejero del banco y presidente de la Fundación Botín, Javier es el representante de la sindicatura que forman los hermanos, Ana incluida. La participación directa de Javier es mucho menor: 0,032%.

En resumen: las compras realizadas por Ana Botín los días 11 y 13 de este mes de diciembre no han alterado el 'statu quo': ella manda en el banco y su hermano pequeño, en la sindicatura y en la Fundación Botín. Así lo refleja la notificación publicada este lunes en la CNMV:

“Las acciones reflejadas en la posición final forman conceptualmente parte del pacto de sindicación, siendo notificadas adicionalmente por D. Francisco Javier Botín-Sanz de Sautuola y O’Shea como presidente del pacto de sindicación comunicado al mercado mediante hechos relevantes Nº 211556 (03.10.2014) y Nº 226968 (29.07.2015)”.