• Fue hombre de la máxima confianza de Emilio Botín y ocupó durante años el cargo de secretario general y del Consejo del banco.
  • Ahora habrá que ver si imputan a la entidad o solo a los investigados.
  • Será el primer encontronazo de Ana Botín como presidenta ante un caso de malas prácticas bancarias.
  • Además, el juez investiga a tres directivos de BNP Paribas.
Sin prisa pero sin pausa. Después de los registros efectuados en la sede del Santander, en Boadilla del Monte, Madrid (en la imagen) en junio de 2016, y de examinar la documentación aportada por los inspectores del Banco de España, el juez de la Audiencia Nacional, José de la Mata, ha citado a declarar como investigados a siete directivos del Santander y a tres de BNP Paribas. Entre los investigados de la entidad española está Ignacio Benjumea Cabeza de Vaca, uno de los hombres de confianza de Emilio Botín que actualmente es consejero externo, y que fue durante años director general y secretario general y del Consejo del banco. Los otros cinco directivos investigados son José Manuel Arraluce, director de Cumplimiento entre 2005 y 2014, Carlos Infesta, responsable de Prevención en banca mayorista entre 2008 y 2010 y, del departamento de prevención de blanqueo, el director, Carlos Fernández, el director de banca privada, Jesús Álvarez, Jesús Rivero y Marta Mora. En cuanto a BNP Paribas, hablamos del director de cumplimiento normativo (2005-2011), José Andrés Fernández, de Lucía Cuartero, del mismo departamento, y de Cristina Arévalo, del órgano de control interno de la entidad. A todos ellos les investiga por un presunto delito de blanqueo de capitales en el banco suizo HSBC. Hablamos de una pieza derivada de la investigación abierta sobre la lista Falciani. Los directivos ahora investigados y antes imputados, declararán los días 12, 13 y 14 de junio. Todo puede pasar. Además, habrá que ver si el juez De la Mata imputa a la entidad o limita sus actuaciones a los citados directivos. Es decir, habrá que ver si el presunto delito era algo institucional o si, por el contrario, los directivos actuaban por su cuenta y riesgo. En cualquier caso, estamos ante el primer encontronazo de Ana Botín como presidenta ante un caso de malas prácticas bancarias. ¿Cuál será su reacción? Ya lo veremos. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com