Como viene siendo habitual, la firma que preside Pablo Isla presenta al mercado sus resultados referidos al tercer trimestre del año en plena campaña navideña y ya al final de las ventas de la temporada de invierno. Con las temperaturas benignas de este año podrían haber sido, como lo han sido para algunos competidores directos como H&M, flojos en cuanto a ventas se refiere. Aunque claro, no ha cumplido las expectativas de los analistas... y eso ha tenido consecuencias en el parqué. 

Voy a empezar mi repaso a los números presentados con la reflexión que probablemente se debieran estar haciendo la mayoría de los inversores en nuestro mercado bursátil, que para mí se resume en la pregunta del millón: ¿Qué sucede con la cotización de Inditex, que se comporta de una forma tan errática?, o dicho de otra forma, ¿qué ven los inversores en este valor para que a principios del ejercicio cotizase a 28,64 euros, en marzo hubiese bajado a 23,26€, en julio volviese a una cotización récord de 29,58€, en noviembre a 23,99€ y ayer cerrase a 26,33€?. De hecho entre el cierre de ayer y la apertura de esta mañana, el título ha perdido un 4,8% de precio (ha abierto a 25,075€), tras la publicación de resultados. Al final, ha cerrado la sesión siendo el único valor del Ibex que ha caído (-4,86%), hasta los 25,05 euros. 

A principios del ejercicio cotizaba a 28,64 euros por acción, ayer cerró a 26,33 euros y tras los resultados, ha bajado a 25 euros 

Yo intuyo que aunque Inditex ciertamente es un valor seguro, los números que presenta en este tercer trimestre no dejan prácticamente dudas, y la compañía se encuentra en la vía rápida de rentabilizar el programa global para que sus ocho cadenas tengan presencia online en el 2020 en todos los mercados. Pero también comienza a haber un porcentaje importante de especuladores en su accionariado.

Así, las ventas, en un entorno de tipos de cambio adverso que a otros les ha supuesto un problema y que en el caso de Inditex el impacto ha sido sólo de un -4,3%, se han situado en los 18.437 millones de euros (M€), un 2,64% más respecto al pasado ejercicio. El coste de las ventas tan solo creció un 1,3%, situándose en 7.743M€, lo que hace que el margen bruto conseguido de 10.695M€ sea un 3,64% superior al del mismo periodo de 2017, que supone un 58% de margen bruto en ventas, algo mejor que el del año pasado a igual fecha (57,4%). Estas cifras se han logrado sin entrar en el entorno de rebajas anticipadas que la competencia comenzó a partir de septiembre con motivo de la climatología anormalmente benigna. 

Las ventas han ascendido a 18.437 millones, con un impacto de los tipos de cambio de sólo un 4,3% y sin rebajas anticipadas 

Los gastos de explotación han crecido un punto por encima de las ventas (+4%), situando el Ebitda en 3.932M€, que significa un 2,96% más que en el mismo periodo de 2017, y repitiendo el margen del 21,3% del pasado ejercicio.

El resultado financiero es positivo de 12M€ (0 en 2017), principalmente motivado por la menor incidencia de las diferencias de cambio, y a pesar del ajuste por -11M€ que ha motivado la hiperinflación en Argentina. La compañía prácticamente no tiene endeudamiento financiero, funciona con el crédito de sus proveedores y mantiene un elevado importe de liquidez: está saneadísima.

Así llegamos a un resultado neto atribuido de 2.438M€ en el periodo frente a los 2.341M€ del pasado ejercicio, lo que supone un +4,14 en términos porcentuales. Lo mismo ha crecido el beneficio por acción, que se ha situado en 0,783€. Todos los márgenes del grupo se han mantenido prácticamente inalterables. Inditex parece un bono.

El grupo está saneado: casi no tiene endeudamiento financiero, funciona con el crédito de sus proveedores y mantiene una elevada liquidez

Hasta aquí no vería más que motivos positivos para invertir en la compañía de Arteixo: buenas ventas, resultados positivos que se mantienen cuando sus competidores flaquean, un posicionamiento de mercado envidiable, prestigio dentro de la moda, un plan ambicioso de venta online avanzadísimo y que en dos años acabará de situarla en todos los mercados mundiales… Todo perfecto y si miras el cuadro de datos financieros desde el 2007 al 2017 que ofrecen en su web, todos los ratios son espectaculares.

Así, los 0,375€ por acción de dividendo no merecen la pena de la espera y es posible que a algunos se les antoje poco para los beneficios que la compañía obtiene. Por otro lado, es posible que les parezca que tanta caja carece de sentido en un entorno de tipos tan bajos. Así que, como cuando el diablo no tiene nada que hacer, mata moscas con el rabo, mejor especular. Eso sí, con un valor seguro y que nos ofrece unas variaciones de cotización que nos permiten entrar a buen precio y salir en poco tiempo con una sustanciosa rentabilidad. Vamos como un hámster en su rueda.