• Fomento de Construcciones cierra un ciclo de tres años en pérdidas, con un discreto beneficio en el primer trimestre de 6,2 millones.
  • El saneamiento ha funcionado: factura el 3,1% más, pero por su actividad en el exterior ( 10%), que compensa el revés en España (-3%).
  • El empresario mexicano no olvida que, para muchos, la única fusión admisible en el sector constructor español era la de FCC con OHL.
  • Pero ahora, Slim quiere convertir FCC en su brazo armado para la construcción en todo el mundo, también en México.
  • El endeudamiento sigue pesando como una losa: aumenta un 12,7%, hasta los 5.651,2 millones de euros.
  • La primera fuente de ingresos es el área medioambiental (692,3 millones de facturación), frente a construcción (433,3 millones).

FCC ha presentado este miércoles sus resultados del primer trimestre, en los que la principal nota de color es la vuelta a los beneficios después de tres años de sufrimientos. Es un discreto beneficio de 6,2 millones de euros, pero beneficio al fin y al cabo. Concluyen así tres ejercicios de duro ajuste y saneamiento, que en el último tramo han afectado directamente a la composición accionarial del grupo, con dos accionistas de referencia, el empresario Carlos Slim (25,64% del capital) y Esther Koplowitz (22,4%). Es, en fin, una nueva FCC, presidida por Esther Alcocer Koplowitz (en la imagen). Los movimientos corporativos han tenido un objetivo prioritario: dejar atrás los números rojos y entrar en beneficios este año. En el primer trimestre lo ha conseguido. Y del cumplimiento de ese objetivo, en el conjunto del año, dependen en distinta medida otros logros que propicia la presencia de Slim. En otras palabras, en el regreso a los números negros están las credenciales que necesita FCC para vestir el grupo, ganar en credibilidad y volver a ser foco de atención para los analistas. De todo ello hablaron Carlos Slim y Esther Koplowitz en Navidad. Carlos Slim quiere convertir FCC en su brazo armado para la construcción en todo el mundo, también en México, donde ha declarado la guerra a OHL. El empresario mexicano no olvida todavía que, para muchos, la única fusión admisible en el sector constructor español era la de FCC con el grupo de Villar Mir. Y el presidente de OHL, por su parte, le acusa de haber revuelto el reciente escándalo en México, donde no tiene poco problemas. En cualquier caso, el grupo ha reenfocado su estrategia a los grandes proyectos internacionales. Y ahora, el 67% de la cartera de obras pendientes de ejecutar, por un valor de 5.876,7 millones, corresponde a proyectos en el exterior. Las cifras presentadas por FCC muestran, por un lado, un débil crecimiento del resultado bruto de explotación (Ebitda), del 0,6% (169,3 millones) y un incremento de 12% en la deuda, hasta 5.651,2 millones de euros, debido a la expansión estacional del capital circulante, al impacto negativo del tipo de cambio y al traspaso a largo plazo de activos financieros corrientes en el área de Construcción. La cifra de negocios aumentó un 3,1%, hasta 1.482,4 millones, gracias a la actividad en el exterior, que ha crecido un 10,9% y ha aportado el 46% del total. Con ese impulso ha compensado la caída del 3% en su negocio en España. Por áreas de negocio, la principal fuente de ingresos, especialmente en el exterior, es la medioambiental, que facturó 692,3 millones ( 3,3%). Le siguen construcción, que aportó 433,3 millones, un 3,5% menos (en España la caída ha sido del 3,7%), y agua, un 10,8% más, hasta 239 millones. El negocio cementero contribuyó con 121,8 millones ( 9,4%). Rafael Esparza