• El grupo tuvo un beneficio neto ajustado de 267 millones y logró un 'extra' de 265 millones por la venta de su negocio DIA France.
  • Digiere la compra de El Árbol y aumenta sus ventas en España un 0,4%, a pesar de la caída de precios.
  • Su apuesta por los países emergentes, donde ya factura la mitad, va bien, aunque le penalizan las devaluaciones de las monedas.
  • El Consejo de Administración se ha recortado un 4% las remuneraciones: percibió 1,87 euros en total.

El Grupo DIA tuvo un beneficio neto atribuido de 329 millones de euros el año pasado, un 57% más que el año pasado, lo que entra dentro de toda lógica sólo por un dato: en diciembre vendió a Carrefour su negocio DIA France por 665 millones, con una plusvalía de 265 millones. Fue entonces cuando la empresa presidida por Ana María Llopis (en la imagen) se olvidó por fin de Francia para crecer en otros países. A partir de ahí, lo demás es secundario. De hecho, el beneficio neto ajustado alcanzó los 267 millones, un 8,4% más, y el ebitda, 585 millones, un 0,4%.

Los resultados de DIA comunicados hoy a la CNMV, por tanto, quitando los extraordinarios, no son para tirar cohetes precisamente. La razón está en las ventas y en el impacto de la cotización de la divisas. DIA, no hay que olvidarlo, venta mucho en España, pero también en China o en países emergentes, como en Brasil o Argentina.

En España las ventas brutas ascendieron a 5.219 millones de euros, apenas un 0,4% más, en un contexto de caída de precios, un estigma en el que la cadena sigue pujando para ser una de las más competitivas. A escala global, crecieron un 1,1%, hasta 9.400 millones. Pero ¿dónde ha vendido más?: en los países emergentes (un 31%), donde más le penalizan las devaluaciones como el real brasileño o el peso argentino. En esos dos países abrió 213 tiendas el año pasado. El consejero delegado, Ricardo Currás, explicó con detalle la estrategia del grupo al presentar los resultados del primer semestre: el punto de mira, dijo, está en otras latitudes en lo que crecía buen ritmo.

Lo que ha destacado Currás, esta vez, es "la exitosa venta de Francia, la adquisición de El Árbol y la integración de Schlecker. Se han transformado más de 600 tiendas Schlecker a la nueva enseña Clarel y se han lanzado más de 1.000 nuevas referencias de marca propia, hemos abierto más de 400 tiendas propias y 325 franquiciadas".

"La exitosa venta en Francia" era el último requisito pendiente para salir de ese país. La cadena se escindió en 2011 de Carrefour y contaba en el país vecino con una red en Francia de 865 supermercados (635 propios y 230 en régimen de franquicias).

El Grupo ha informado también a la CNMV de las remuneraciones percibidas en 2014 por el Consejo de Administración, que se ha reducido un 4% respecto a las de 2013, hasta 1,87 millones de euros en total. La presidenta, Ana María Llopis, cobró 149.000 euros, frente a los 168.000 euros en 2013, y el consejero delegado, Ricardo Currás, 971.000 euros, frente a los 937.000 euros de hace un año.

Rafael Esparza

rafael@hispanidad.com