Las aguas andan algo revueltas en la alianza automovilística franco-japonesa, pues Renault no apoyará los cambios corporativos que quiere hacer Nissan para mejorar el control y el gobierno corporativo tras el ‘caso Ghosn’. Mientras que el deseo de la nipona es reducir el poder del Gobierno francés y acabar con su doble derecho de voto.

En concreto, Renault ha anunciado que se abstendrá en la Junta de Accionistas de Nissan, que tendrá lugar el próximo 25 de junio, respecto a la creación de tres comités. Por tanto, bloqueará los planes de la marca nipona para mejorar su reputación, porque se necesita dos tercios de los accionistas para que la medida sea aprobada y Renault es dueño del 43,4%.

El CEO de Nissan, Hiroto Saikawa, ha señalado que es “lamentable” el cambio de postura de la firma gala. Y es que sus representantes en el Consejo dieron el visto bueno a los cambios corporativos, pero ahora anuncia su abstención en la Junta. Para rebajar la tensión, este lunes, el ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire, se reúne con el de Industria japonés, Hiroshige Seko.

Nissan lanza un cierto ‘chantaje’: no se opondría a la fusión con Fiat Chrysler, si Renault baja su participación del 43,4%

Todo esto días después de que el presidente galo, Emmanuel Macron, se cargara la fusión entre Renault y Fiat Chryler. Pero según Reuters, ambos fabricantes siguen estudiando vías para recuperar el proyecto de fusión, porque “sigue siendo una buena oportunidad”, según Le Maire. Y al hilo de esto, Nissan no ha perdido la ocasión de lanzar un cierto ‘chantaje’: podría no oponerse a la operación si Renault baja su participación del 43,4%, y además, en la nueva fusionada el Gobierno francés perdería su doble derecho de voto. Algo que interesa y mucho a la firma nipona, que, a pesar de tener el 15% del capital de Renault, no tiene derecho de voto. 

Paralelamente, la ministra de Industria (ahora en funciones), Reyes Maroto, junto al embajador de España en Japón, Jorge Toledo, se ha reunido en Tokio con el vicepresidente de Nissan, Osamu Goto, para analizar los planes de la compañía en Europa y explorar oportunidades de consolidar y ampliar sus operaciones en España. Es relevante, sobre todo, esto último, porque la firma nipona es la única asiática que fabrica en España, pero ha anunciado un ERE en Barcelona, ha llegado a un preacuerdo de 76 prejubilaciones y para el VI Convenio Colectivo en Cantabria y ha roto las negociaciones con el comité de empresa en Ávila por el mantenimiento de las huelgas anunciadas.