Renault celebra en bolsa (ha subido más de un 8% durante la sesión y ha cerrado con un alza del 10,49%) este miércoles haber obtenido el crédito bancario prometido de 5.000 millones de euros, avalado en un 90% por el Estado francés (al fin y al cabo, es dueño del 15% del grupo automovilístico), tras los ajustes anunciados. La semana pasada se presentó el plan de ayudas de Emmanuel Macron, se reorganizó la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi y la firma gala anunció su plan para ahorrar 2.000 millones de euros (reducirá capacidad, no en España, y recortará 15.000 empleos).

El grupo recibirá el dinero de un pool bancario compuesto por: BNP Paribas, Crédit Agricole, HSBC France, Natixis y Société Générale. Podrá usarlo total o parcialmente en una o más ocasiones antes del 31 de diciembre y el vencimiento de cada utilización será de 12 meses, pero se podrá extender a tres años.

Con esta línea de crédito de 5.000 millones, Renault “garantizará la financiación de las necesidades de liquidez, en un contexto de crisis sin precedentes”. Asimismo, con la subida en bolsa en esta jornada, la cotización se ha revalorizado un 30% desde el pasado 22 de mayo. Unas buenas noticias a menos de un mes para recibir al nuevo CEO, el italiano Luca de Meo.