• No habrá independencia de Cataluña.
  • Eso sí, se niega a decir cuáles son los medios del Estado para acabar con el secesionismo.
  • 3,7 millones de catalanes no pueden decidir por 47 millones de españoles.
Le tocaba -again- al presidente del gobierno Mariano Rajoy responder al nuevo desafío de Artur Mas (ambos en la imagen) y su lista única por la independencia. El presidente niega que haya un choque de trenes y se centra en "tranquilizar" a los catalanes, ninguno de los cuales se verá obligado a elegir entre "Cataluña, España y Europa", porque podrán seguir manteniendo las tres condiciones, dado que "no habrá independencia de Cataluña". Al tiempo, recuerda que las elecciones catalanas de septiembre son eso, catalanas autonómicas, nada más. Eso sí, se niega responder a dos preguntas: a si Alicia Sánchez Camacho será la candidata del PP en Cataluña y a qué medidas tomarán en el caso de que el enloquecido Quijote-Mas decida declarar la independencia de Cataluña. A la primera pregunta, incluso tiene la impertinencia de remitir a "Génova 13". Un detalle muy feo, don Mariano. Y además de las habituales alusiones a la ley, que es sagrada, Rajoy retoma el argumento más sólido contra Quijote-Mas: no se puede permitir que una parte de España decida sobre el conjunto de España. En efecto no se puede permitir que 7,5 millones de catalanes (mejor que 3,7 millones pues la mitad no son independentistas) no pueden decidir por 47 millones. En definitiva, en el referéndum de independencia de Cataluña deberíamos votar todos. Pero eso no le iba a gustar a Artur. En cualquier caso, a Rajoy se le ve un tanto cansado del asunto secesionista. La verdad, no me extraña. Eulogio López eulogio@hispanidad.com