El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, está inmerso en un escándalo político a raíz de la difusión del contenido de un chat en el que junto a su círculo íntimo en el gobierno se mofan de periodistas y líderes políticos de la isla.

Mientras enfrenta una intensa presión para que renuncie, el gobernador Ricardo Rosselló se dirigió a los habitantes de Puerto Rico el 16 de julio, la mañana posterior a las protestas multitudinarias que sacudieron las calles de la capital, San Juan, y se negó a renunciar a su cargo a pesar de lo que él reconoció como un amplio descontento popular, recoge Infobae.

"Entiendo perfectamente que era un mensaje en contra de mi persona", dijo en una prolongada conferencia de prensa en la mansión del gobernador. Sin embargo, agregó: "Yo voy a continuar en mi trabajo y mi responsabilidad con el pueblo de Puerto Rico".

"Yo voy a continuar en mi trabajo y mi responsabilidad con el pueblo de Puerto Rico"

La actual convulsión política en la isla, incluidos los arrestos por corrupción federal de la semana pasada, causó que la Casa Blanca argumentara el 16 de julio que el presidente estadounidense, Donald Trump, había estado en lo correcto al calificar la administración de Rosselló como incompetente. Puerto Rico busca miles de millones de dólares en fondos federales para la recuperación del huracán María.

En respuesta a la Casa Blanca, Rosselló dijo que la corrupción ha plagado gobiernos en todos lados, no solo en Puerto Rico aunque concedió que ha sido un problema "históricamente" en la isla. "La corrupción es un mal social", dijo. "Es un mal social en el sector privado, es un mal social en el gobierno local, es un mal social en el gobierno federal".