• Y eso que fue firmado por los sindicatos mayoritarios.
  • Los trabajadores ya no hablan de un "otoño caliente" sino de un "invierno ardiente".
Cerca de medio centenar de vigilantes de seguridad realizaron el miércoles un acto reivindicativo en la Plaza de Callao y la Puerta del Sol de Madrid. A pesar de que los sindicatos mayoritarios dicen que el "otoño caliente" ha terminado, el grueso del sector de seguridad privada está muy descontento con el convenio colectivo firmado por estos sindicatos, ya que congela el salario de 2017 y tiene una subidas mínimas durante los siguientes tres años de vigencia, sin contemplar medidas como la mejora de medios materiales, de la conciliación laboral o de la regulación legal de estos profesionales. Como novedad, este acto ha contado con una performance con varios vigilantes encadenados y disfrazados de esclavos haciendo clara alusión a sus nefastas condiciones económicas, laborales y legales. Asimismo, según la última asamblea de trabajadores del aeropuerto Adolfo Suárez, los vigilantes de los controles de seguridad de este aeropuerto irán a la huelga durante el mes de diciembre si la empresa que lo gestiona no atiende a sus peticiones. Si estas protestas se suman a los conflictos de los vigilantes de seguridad de Metro de Madrid o del Ministerio de Defensa, los vigilantes auguran que el fin del "otoño caliente" pasará a ser un "invierno ardiente". Andrés Velázquez andres@hispanidad.com