Bernie Sanders ganó con estrecho margen las primarias presidenciales demócratas de Nuevo Hampshire el martes, solidificando su estatus de favorito en la carrera por la Casa Blanca y dando un revés a su rival, Joe Biden, que terminó en un decepcionante quinto lugar, informa Reuters.

Pete Buttigieg, el ultra-abortista de 38 años, terminó en un estrecho segundo lugar después de superar a Sanders en la caótica y disputada primera contienda de nominación de la semana pasada en Iowa. Ambos rivales han pedido una revisión parcial de los resultados de Iowa.

Sanders, el senador progresista de la vecina Vermont, prevaleció después de defenderse de las críticas de sus rivales, que advirtieron que sus opiniones de extrema izquierda llevarían al partido a la derrota en las elecciones del 3 de noviembre contra el presidente republicano Donald Trump.

“Esta victoria es el principio del fin para Donald Trump”, dijo Sanders a sus seguidores en Manchester, Nuevo Hampshire.

También fue una buena noche para la senadora Amy Klobuchar, que logró el tercer puesto tras un fuerte debate el viernes.

Biden, el ex vicepresidente que una vez fue el primero en la carrera demócrata, ha sido castigado nuevamente después de quedar en cuarta posición en Iowa. Es seguro que se enfrentará a crecientes dudas sobre la viabilidad de su campaña y su capacidad para consolidar un apoyo moderado contra el auge de Buttigieg y Klobuchar.

Biden, acumula dos intentos fallidos en la carrera presidencial antes ganar las elecciones en 2008 como el número 2 del entonces presidente Barack Obama. El candidato espera mantenerse a flote esta vez hasta la votación del 29 de febrero, en Carolina del Sur, y en una serie de votaciones en otros estados del sur en el llamado “Súper Martes” del 3 de marzo, donde hará acto de presencia en su baluarte electoral gracias al apoyo entre la comunidad afroamericana.

Sin una buena actuación allí, su carrera política podría llegar a su fin.