Los Presupuestos para 2019 presentados este lunes en el Congreso se resumen en mayores gastos e impuestos, pero ojo, porque estos últimos seguirán subiendo. ¿La razón? La baja presión fiscal, según ha explicado la ministra de Hacienda. Clao que habló deprsión fiscal, no de esfuerzo fiscal.

María Jesús Montero ha subrayado que en España es del 34,5%, bastante inferior a la media europea (41,4%), a la cual “hay que acercarse”. Por ello, ha apostado por subir impuestos, sobre todo, a grandes empresas y rentas altas, aunque la subida de las cotizaciones sociales afecta a todos, pero también por crear nuevos tributos (la famosa ‘tasa Google’ o el impuesto sobre Transacciones Financieras). De esta forma, la presión fiscal “será del 35,5% en 2019”, acortando un punto su distancia con la media europea.