Murcia ya es, oficialmente, de derechas. PP, Ciudadanos y Vox han llegado a un acuerdo, gracias a la cesión de este último respecto a la Ley LGBTI, ya que ha eliminado todas las referencias que hacía respecto a reformar la ley autonómica de igualdad del colectivo. Cabe recordar que el partido de Albert Rivera declaró no pactar "con partidos que frivolicen con la violencia machista, que estigmaticen a los inmigrantes o que ataquen al colectivo LGTBI y los derechos y libertades que han conquistado a lo largo de los años". 

Lo cierto es que Vox se va dejando en sus pactos retazos de su ideario, Porque las leyes LGTBI de Murcia y otra comunidades autónomas, para la mayoría de los votantes de Vox, no protegen los derechos de los homosexuales y sí recortan la libertad de expansión y la libertad de los padres para educar a sus hijos según sus convicciones.

En cualquier caso, el popular Fernando López Miras será investido presidente, en una votación posterior a la de la investidura de Pedro Sánchez de la semana que viene. Respecto al pacto con Vox, ha afirmado que, tras analizar el documento, las ideas y peticiones son “perfectamente compatibles y complementarias” con las de Ciudadanos. Además, ha destacado la "generosidad" del partido de Abascal por facilitar la formación de un gobierno de derechas.

Eso sí, Vox insiste en la libertad de educación para "garantizar el derecho de los padres a elegir la formación moral y religiosa” y añaden en el documento que “no se adoctrine a los niños más allá de las asignaturas curriculares”. Además, insiste en la creación de una ley autonómica de Protección Integral de la Familia, con “partidas presupuestarias concretas para el apoyo a la maternidad, fomentado así la natalidad”.