• ¿Podrán afrontarlo? Difícil sin la ayuda de la propia entidad.
  • Y ese es el verdadero núcleo duro de Ángel Ron.
  • Los institucionales, como Allianz, pueden diluirse.
  • La gran incógnita: ¿Qué hará Crédit Mutuel?
  • La entidad francesa esconde un tiburón debajo de la apariencia mutual.
  • Respecto a la ampliación, está aseguradísima... gracias a su descuento brutal.
  • La entidad corrige las estimaciones para 2016: podría perder 2.000 millones.
La sindicatura de accionistas controla el 9,8% del Popular. De ese porcentaje, alrededor del 2,5% está en manos de Unión Europea de Inversiones, esto es, de las familias tradicionales del banco como, por ejemplo, los Molins o los Montuenga. El 7,3% restante está en posesión de directivos y empleados del banco. Es la sindicatura de toda la vida. La suma de las dos participaciones alcanza el 9,8% del banco. Es el verdadero núcleo duro de Ángel Ron (en la imagen). Pues bien, la macro ampliación de 2.500 millones de euros anunciada el jueves 26 de mayo significa que, si no quieren diluir su participación, las familias tradicionales de la entidad –Unión Europea de Inversiones- tendrán que aportar cerca de 150 millones de euros. Por su parte, los directivos y empleados del banco, la sindicatura de toda la vida, tendrá que poner unos 440 millones sobre la mesa si no quiere bajar del 7,3% que controla actualmente. La cosa es seria porque, como hemos señalado, es el auténtico núcleo duro de la entidad, el apoyo del que no quiere prescindir, bajo ningún concepto, el presidente Ron. Ahora bien, ¿podrán afrontar el desembolso? Será difícil sin la ayuda de la propia entidad. 590 millones son muchos millones para unos accionistas que aún no han olvidado la ampliación de 2012, también de 2.500 millones. ¿Qué pasa con los institucionales? A Ron no le preocupan más allá de que su compromiso para acudir suponga un respaldado para el resto de accionistas. En este sentido, Allianz ya ha manifestado su intención de acudir a la ampliación, tras la cual tendrá un 3% del banco en lugar del 3,3% actual. Allianz es un accionista 'cómodo'. El acuerdo de bancaseguros que mantiene con el Popular le va bien y no pretende ir más allá. Lo mismo ocurre con los fondos. ¿Qué no quieren poner más dinero? No importa, ya vendrán otros, animados por el descuento brutal de casi el 50%. La gran incógnita es Crédit Mutuel, que controla el 4% del banco, pero siempre ha aspirado a mucho más. El banco galo esconde un tiburón tras la apariencia mutual. En el fondo se trata de una entidad del Estado, que no puede ser opada –es una mutua- pero que puede opar a otras si lo desea. Recuerden cómo, con motivo de la anterior ampliación (2012) intentó hacerse con el control de la entidad española, pero el Banco de España se lo impidió. El Popular no podía acabar en manos francesas. En cuanto a la ampliación, está aseguradísima. En un hecho relevante remitido este viernes a la CNMV, el Popular señala que hay 14 bancos colocadores, de los que 12 también son aseguradores. ¿Es un éxito? Pues hombre, lo que les anima es el descuento de casi el 50%. Y el descuento significa que estás regalando el banco. A todo esto, el banco ha dado dos malas noticias: no habrá dividendo en 2016 y, peor aún, cree que perderá alrededor de 2.000 millones de euros. Tras la caída del 26% del jueves, la cotización del Popular ha cerrado este viernes con un retroceso del 8,2%. En dos días, ha perdido un 34,2 por ciento, todavía por debajo del descuento. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com