Un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT)  -Perspectivas sociales y del empleo en el mundo-Tendencias 2020- concluye que hay "deficiencias significativas en la calidad del empleo" por las que casi 500 millones de personas trabajan menos horas remuneradas de las que desearían o no tienen un empleo "decente". Según la OIT, la ausencia de salarios adecuados, de seguridad en el empleo, de protección social y de defensa sindical hacen que cada vez sea más difícil que las personas se construyan una vida mejor gracias a su trabajo, recoge RTVE.

"Para millones de personas corrientes, es cada vez más difícil construir vidas mejores gracias al trabajo", señala el director general de la OIT, Guy Ryder, que añade que "la persistencia y la amplitud de las exclusiones y las desigualdades relacionadas con el trabajo les impiden encontrar un trabajo decente y forjarse un futuro mejor".

En este grupo, se encuentran los 188 millones de desempleados que la OIT ha registrado en el mundo, pero también los 165 millones de personas que no tienen suficiente trabajo remunerado y los 120 millones que, o bien han desistido de la búsqueda activa de empleo, o no tienen acceso al mercado laboral.

En España, 1,2 millones de personas contaban con un empleo, pero deseaban trabajar más horas, mientras que otros 0,9 millones no tenía trabajo

En este sentido, el informe de la OIT destaca que, "mientras a nivel mundial la fuerza de trabajo incrementa, no se están creando suficientes nuevos empleos para absorber a los que se incorporan al mercado laboral". Si a esto se le añade la desaceleración del crecimiento económico, el organismo prevé que el número mundial de desempleados aumente en 2020 hasta alcanzar una cifra cercana a los 2,5 millones de nuevos parados. No obstante, la tasa de desempleo mundial, que en 2019 era del 5,4%, "no variará excesivamente en los próximos años", según el documento.

El informe también analiza las desigualdades en el mercado laboral que, por lo que respecta a los ingresos, son "superiores a lo que se pensaba" a la luz de los nuevos datos.

En general, el documento destaca que la parte del ingreso nacional destinada a la mano de obra disminuyó de manera sustancial, pasando del 54% en 2004 al 51% en 2017. La caída es más acentuada en Europa, Asia Central y todo el continente americano.

También en España, la OIT ha detectado una subutilización total de la fuerza de trabajo del 23%, cifra sustancialmente más alta que la tasa de desempleo convencional

Por otra parte, una de cada cinco personas de la población activa mundial sufre pobreza moderada o extrema, es decir, hay 630 millones de personas en el mundo que cobran menos de 3,20 dólares al día. Además, la OIT prevé que esta cifra, cuya mejora es necesaria para cumplir con el primer Objetivo de Desarrollo Sostenible 2030 relativo a la erradicación de la pobreza, crecerá entre 2020 y 2021, sobre todo en los países en desarrollo.

Respecto a España, 1,2 millones de personas contaban con un empleo, pero deseaban trabajar más horas, mientras que otros 0,9 millones no tenía trabajo. Ante estas cifras, la OIT ha detectado una subutilización total de la fuerza de trabajo del 23%, cifra sustancialmente más alta que la tasa de desempleo convencional, cuya recuperación puede verse amenazada por la previsión de un crecimiento más moderado, tal y como ha ratificado este lunes el FMI, debido a la desaceleración económica mundial y regional.

De acuerdo con el informe, en España, igual que a nivel mundial, el problema de la subutilización de la fuerza de trabajo va mucho más allá de la tasa de desempleo, que en las fechas en las que se realizó el estudio -entre enero y septiembre de 2019- era de 3,3 millones de personas y representaba el 14% de la fuerza de trabajo.