El tema de las pensiones sigue siendo de actualidad, pero conviene subrayar que a pesar de las manifestaciones, España sí trata bien a los jubilados. De hecho, nuestro país tiene las quintas pensiones más altas de la Unión Europea (UE) atendiendo a la tasa de sustitución -relación entre primera pensión y último salario-, que se sitúa en el 66%.

Este porcentaje es idéntico al de Rumanía, colocándose por detrás de Luxemburgo (88%), Italia (69%), Francia (68%) y Hungría (67%). Claro que España tiene una posición muy superior a la media de la UE y la eurozona (ambas con un 58%) y a países como Reino Unido (53%), Holanda (50%), Dinamarca (47%), Alemania (46%) o Irlanda (35%), entre otros.

El panorama también es muy positivo para los jubilados españoles si se comparan sus pensiones con los ingresos medios del resto de la población: son las cuartas más altas de la UE, tras Luxemburgo, Grecia y Francia. Es decir, que en la comparación de pensiones, España sale mejor parada que en la de salarios (mínimo y medio)… a pesar de las manifestaciones de pensionistas que están teniendo lugar en las últimas semanas.

A Bruselas no le hace gracia la subida de pensiones pactada con el PNV porque no son bajas y además España debe acabar con el déficit

Y es que parece que los jubilados no están contentos con la subida extra de pensiones que ha aprobado el Gobierno, tras el pacto con el PNV. Pero ojo, tampoco ha hecho demasiada gracia en Bruselas, que ha recordado que España debe acabar con el déficit y no tiene unas pensiones bajas.

Paralelamente, no hay que olvidar que se habla mucho de subir las pensiones, pero no tanto de retrasar más la edad de jubilación. Algo que nadie se atreve a decir porque no suena políticamente correcto, pero que resulta clave en este contexto de invierno demográfico y envejecimiento de la población que vivimos.