• La vicepresidenta no asume la tarea de coordinar al Ejecutivo en este asunto, sino que lo hace la ministra de Fomento, quien ya se ha trasladado a Gran Canaria.
  • No se llevan muy bien, de hecho, Pastor es una de las más 'antisorayistas' dentro del Gobierno. Bloque donde también están García-Margallo, Fernández y Soria.
  • El principal motivo de esta rivalidad es la relación que ambas tienen con Rajoy: Soraya es su número dos, mientras que Pastor presume de ser su amiga personal.
  • El presidente del Gobierno lo pasó muy mal con el Prestige y no quiere que aquello se repita. Además no le convienen los escándalos en este año 'multielectoral'.
Por si el Gobierno tiene pocos asuntos de los que estar pendiente, ahora tiene uno más que atender. Se trata del nuevo pulso entre dos de sus miembros, en concreto, entre la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y la ministra de Fomento, Ana Pastor (ambas en la imagen). Esta vez, la pugna ha surgido por el hundimiento del pesquero ruso Oleg Naydenov. En concreto, la vicepresidenta no ha asumido la tarea de coordinar al Ejecutivo en este asunto, a pesar de que así lo indicó, en un primer momento, la portavoz parlamentaria de Coalición Canaria, Ana Oramas. Un rato después, Moncloa negó que Sáenz de Santamaría se encargara de dicha coordinación. Y es que quien ha asumido esta función ha sido Ana Pastor, que se trasladó en la tarde del pasado miércoles a Gran Canaria. No es ningún secreto que ambas miembros del Ejecutivo no se lleven muy bien, de hecho, la política gallega es una de las más 'antisorayistas' dentro de Moncloa. Un bloque en el que también están los titulares de Exteriores, Interior e Industria, por lo tanto, José Manuel García-Margallo, Jorge Fernández Díaz y José Manuel Soria, respectivamente. Mientras, entre los amigos de Soraya destacan los de Empleo, Hacienda y Sanidad, es decir, Fátima Báñez, Cristóbal Montoro y Alfonso Alonso. El principal motivo de esta rivalidad entre Sáenz de Santamaría y Pastor es la relación que ambas tienen con el presidente, Mariano Rajoy. La primera es su número dos y, por lo tanto, debe ser su mano derecha, aunque a veces hayan tenido alguna que otra disputa y ansíe ocupar la silla de su jefe, convirtiéndose en la primera presidenta de España. Mientras que Pastor presume de ser su amiga personal, además Rajoy la considera su 'chica de confianza', aunque no duda en humillarla, pues como dice el refrán, donde hay confianza da asco. El pasado miércoles, el presidente del Gobierno compareció en el Congreso para informar sobre el Consejo Europeo de los días 19 y 20 de marzo. Una sesión plenaria en la que estuvo todo el tiempo junto a Soraya, sin embargo resulta curioso que después mandara a su chica de confianza (Pastor) a coordinar el asunto del hundimiento del Oleg Naydenov en Gran Canaria. En concreto, se han apreciado manchas de combustible fragmentadas en una franja de seis kilómetros de longitud y dos de ancho, además la patrullera Río Tambre de la Guardia Civil ha encontrado una tortuga contaminada con restos de fuel. Rajoy lo pasó muy mal con el Prestige, pues en ese momento ocupaba el cargo de portavoz y el de ministro de la Presidencia en el Ejecutivo de Aznar, y se ha arrepentido mucho de sus famosas declaraciones de "hilillos de plastilina", por eso no quiere que aquello se repita. Además no le convienen los escándalos en este año 'multielectoral' y en la situación actual de empate técnico entre PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos. Antes del hundimiento del pesquero ruso, el último asunto delicado de la cartera de Pastor ha sido la tragedia aérea de Germanwings. En cuanto sucedió, la ministra de Fomento se desplazó a la zona para seguir en primera persona las tareas de rescate, mientras que Rajoy se encargó de presidir el primer gabinete de crisis en Moncloa. Sin embargo, el presidente del Gobierno no dudó en hacerle sombra a su amiga Pastor cuando sus homólogos de Alemania y Francia, Angela Merkel y François Hollande, confirmaron que visitarían la zona. Además Rajoy delegó en Soraya la presidencia del gabinete de crisis, que estuvo al frente del mismo desde su segunda reunión, pero se apuntó el tanto de liderar la primera. Cristina Martín cristina@hispanidad.com