• La candidata del PP a la Comunidad de Madrid ya tuvo polémica por la lista con Esperanza Aguirre, que concurre al Ayuntamiento de la capital y preside el PP madrileño.
  • Pero ahora el lío lo tiene con la actual alcaldesa de Madrid, que no ha dudado en usar el teléfono para que su mano derecha subiera del puesto 62 al 51.
  • Botella dice ante los medios que no comenta "ninguna conversación privada con nadie", pero no oculta que su equipo de Gobierno "merece un reconocimiento".
  • Al PP le importa más la región que el consistorio madrileño, aunque en ambos tiene la batuta desde 1991. Los sondeos apuntan que deberá pactar si quiere tenerla tras el 24 de mayo.
Parece que nuestros políticos no escarmientan y no son tan perfectos como en ocasiones quieren hacernos creer, pues, a pesar de que les gustaría ser superhéroes, son humanos. Esta vez la que ha tropezado ha sido la candidata del PP a la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, pues la actual alcaldesa de la capital, Ana Botella, también ha interferido en su lista, logrando que el concejal Diego Sanjuanbenito subiera hasta puestos 'elegibles'. Veremos si su 'esfuerzo' tiene frutos tras el 24 de mayo porque la elección o no de su 'mano derecha' está en manos de los ciudadanos. No es el primer traspiés que tiene Cifuentes en relación a la lista electoral. Hace unos días tuvo una polémica con la candidata al Ayuntamiento de Madrid, Esperanza Aguirre, que además es su 'jefa', pues es la presidenta de los 'populares' madrileños. Cifuentes señaló que "la lista no la he hecho yo, la ha hecho el PP de Madrid", algo que siempre se hace así, excepto el primer puesto que ha sido elegido por  Mariano Rajoy. "Me hubiese gustado incorporar alguna persona, pero cuando la lista no la hace uno...", declaraciones que se pueden ver como un lamento por no poder incluir a todos los 'progres' que le gustaría y tener que hacer sitio a la 'casta' del PP. La candidata 'popular' a la Comunidad de Madrid no cae a todos bien dentro de Génova, por presumir, en varias ocasiones de ser republicana, abortista y feminista. Cifuentes trató de quitar hierro a la polémica con la poderosa Aguirre al hacer uso de lo políticamente correcto, diciendo que "apoya" la lista y se siente "muy a gusto". Pero poco después de que las aguas volvieran a su cauce surgió un nuevo lío. Esta vez con la actual alcaldesa de Madrid, Ana Botella, que no ha dudado en telefonear a Génova (el ABC señala que habló con Rajoy) para que uno de sus 'hombres fuertes' subiera posiciones en la lista de Cifuentes. Su iniciativa tuvo éxito, pues el delegado de Medio Ambiente y Movilidad en el consistorio, Diego Sanjuanbenito, pasó del puesto 62 al 51, en un intercambio de posiciones con el diputado Tomás Serrano. Al hilo de la llamada, Botella ha dicho, este jueves, ante los medios que no comenta "ninguna conversación privada con nadie", pero no ha ocultado que su equipo de Gobierno "merece un reconocimiento" por su "fantástica labor". Hasta el recuento de votos tras las elecciones autonómicas del próximo 24 de mayo no se sabrá si el 'esfuerzo' de Botella ha merecido la pena, aunque conviene señalar que las previsiones 'populares' pasan por lograr cerca de 50 escaños en la Comunidad de Madrid. Al PP le importa más la región (129 diputados) que el consistorio madrileño (57 concejales), aunque en ambos tiene la batuta gubernamental desde 1991. Los sondeos apuntan a que tendrá que pactar si quiere tenerla tras el 24 de mayo, por ejemplo, el último que ha elaborado el periódico El Mundo con Sigma Dos, coloca a Ciudadanos como la llave en Madrid. En concreto, señaló que el PP obtendría entre 44 y 45 escaños, muy lejos de los 72 que logró en 2011 y de la mayoría absoluta (establecida en 65); el PSOE, 28; Podemos, 25-26; Ciudadanos, 22-23 e IU, 8-9 escaños. Por si acaso los 'naranjitos' de Albert Rivera son fundamentales, tanto Cifuentes como Aguirre presumen de tener una buena relación con el político catalán y le lanzan algún guiño, avisando de que sus programas no son tan diferentes. Cristina Martín cristina@hispanidad.com