Miles de neozelandeses se congregaron este viernes 22 de marzo del 2019 en Nueva Zelanda para recordar a los 50 fieles musulmanes que murieron hace una semana en el ataque de un supremacista blanco, con una llamada a la oración emitido por todo el país y dos minutos de silencio, informa El Comercio.

Ante miles de personas, entre ellas la primera ministra Jacinda Ardern, congregadas en silencio en un parque frente a la mezquita de Al Noor, un muecín hizo el llamado a la oración musulmana de los viernes, con cánticos de “Allah akbar” ("Dios es el más grande") .

Yo me puedo quitar el pañuelo si siento miedo. Ellos, no

Después, toda Nueva Zelanda, de 4,5 millones de habitantes, guardó dos minutos de silencio. En la vecina Australia, la gente se detuvo en las calles y los comercios para señalar el momento.

Muchas de las mujeres asistentes lucían velos en solidaridad con la comunidad musulmana de Nueva Zelanda. “Yo me puedo quitar el pañuelo si siento miedo. Ellos, no”, dijo una de ellas. El atacante mató a 50 hombres, mujeres y niños de entre tres y 77 años, y dejó decenas de heridos en un ataque difundido en directo en Internet.

“Miro y veo amor y compasión en los ojos de miles de neozelandeses y seres humanos de todo el planeta”, dijo el imán

Cincuenta fieles murieron hace una semana por los disparos de Brenton Tarrant, un supremacista blanco declarado, en dos mezquitas de Christchurch, la mayor ciudad de la Isla Sur de Nueva Zelanda, un país conocido por su tolerancia.

Tras los dos minutos de silencio, el imán de la mezquita de Al Noor, Gamal Fouda, tomó la palabra para condenar el odio y elogiar el sentido de unidad que generó la matanza entre los neozelandeses. “Miro y veo amor y compasión en los ojos de miles de neozelandeses y seres humanos de todo el planeta”, dijo. “Este terrorista intentó romper nuestra nación con una ideología malvada que ha desgarrado el mundo. Pero, en lugar de eso, hemos demostrado que Nueva Zelanda es irrompible”, señaló el imán.