El P. David Echioda, de la Diócesis de Otukpo (Nigeria), secuestrado en el estado de Benue tras celebrar la misa dominical, fue liberado por sus raptores, informa Aciprensa.

En un comunicado, la Diócesis de Otukpo indicó que fue “confiablemente informada de que el P. David Echioda fue liberado por sus secuestradores”.

El sacerdote, que trabaja en el seminario menor en Ochobo, estuvo realizando actividades misioneras antes de ser privado de su libertad.

El P. Anthony Bruno Shawuya, subdirector del centro de medios de la provincia eclesiástica de Kaduna, envió un mensaje a ACI África para agradecer “las oraciones y apoyo durante este momento de prueba”.

El secuestro del P. Echioda ocurrió el mismo día en que los obispos católicos del país realizaron una marcha pacífica en Abuja, la capital de Nigeria, en protesta por la persecución contra los cristianos.

La protesta “es parte de nuestra obligación religiosa de hablar proféticamente contra todo lo que vaya contra los mandamientos de Dios”, dijo el domingo el presidente del Episcopado nigeriano, Mons. Augustine Obiora Akubeze.

“El asesinato de los hijos de Dios es un mal. El fracaso al proteger a gente inocente de un ataque implacable es un mal. No procesar a los terroristas también es un mal”, señaló el Prelado africano.

“Protestamos contra los brutales asesinatos de nigerianos inocentes por parte de Boko Haram y otros terroristas que están invadiendo las tierras de las familias a la fuerza”, agregó.

Protestamos contra los brutales asesinatos de nigerianos inocentes por parte de Boko Haram y otros terroristas que están invadiendo las tierras de las familias a la fuerza, señaló el Prelado africano

El Arzobispo pidió a Occidente condenar las atrocidades cometidas por los terroristas yihadistas y que presten la misma atención que dan a otros grupos como Al Qaeda y el Estado Islámico.

Con esto las personas podrían ver que “hay que gente que muere diariamente en Nigeria a manos de Boko Haram, del mismo modo que ocurre en Siria”.

Este secuestro es el último de una serie de raptos y asesinatos en Nigeria que han afectado a sacerdotes, seminaristas y laicos.

En febrero, otro sacerdote fue secuestrado por hombres armados en el estado de Edo, en el suroeste del país.

El seminarista Michael Nnadi, de 18 años, fue asesinado a fines de enero, semanas después de ser secuestrado con otros tres seminaristas, los cuales fueron liberados.

Boko Haram, un grupo militante islamista que ha jurado lealtad al Estado Islámico, ha estado activo en Nigeria desde 2002. Si bien el grupo ha atacado a musulmanes y cristianos en el pasado, en los últimos meses se ha centrado en el asesinato y el secuestro de cristianos.

También en enero, el reverendo Lawan Andima, presidente del gobierno local de la Asociación Cristiana de Nigeria, fue decapitado por Boko Haram.