De todos es bien sabido que el del aborto es un negocio muy siniestro a la par que lucrativo.

Pues bien: el informe anual de la multinacional abortista Planned Parenthood mostró una vez más un incremento en el número de abortos realizados y en el financiamiento gubernamental con respecto al año anterior, recoge Aciprensa.

Según su último informe anual, Planned Parenthood realizó 354.871 abortos en el año fiscal 2019-20, un aumento del 2,7% con respecto al año 2018-19, que a su vez había aumentado un 3% con respecto al año anterior.

“El negocio de Planned Parenthood es el aborto, no la atención médica”, dijo Marjorie Dannenfelser, presidenta de la agrupación provida Susan B. Anthony List, en respuesta al informe. Además, señaló que el número de abortos de la organización aumentó “a la vez que los abortos en los Estados Unidos, en general, han estado disminuyendo durante mucho tiempo”, añade Aciprensa.

La Casa Blanca ha reafirmado el apoyo del presidente Joe Biden a la financiación federal de Planned Parenthood

Planned Parenthood es el proveedor de abortos más grande del país. Durante el Gobierno de Donald Trump, el Congreso y el Ejecutivo han buscado separar a la organización por completo de los fondos públicos del programa de seguros Medicaid y de los fondos federales de planificación familiar.

Mientras tanto, la Casa Blanca ha reafirmado el apoyo del presidente Joe Biden a la financiación federal de Planned Parenthood, y Biden ha emitido una guía que dice que los estados no pueden negarse a financiar la organización con dólares de Medicaid, apunta Aciprensa. Biden también apoya la derogación de la Enmienda Hyde, que prohíbe la financiación federal de abortos voluntarios.

Dannenfelser también advirtió de los esfuerzos de Planned Parenthood y otros grupos proaborto para relajar las restricciones federales sobre el régimen de la píldora abortiva, haciéndola disponible sin receta y a través del servicio postal. Actualmente, las regulaciones de la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) exigen que la píldora abortiva se recete en persona en una clínica de salud.

“Nunca dejaremos de luchar para detener el financiamiento de los contribuyentes a la industria del aborto y brindar las alternativas que afirman la vida que merecen las mujeres y las familias”, dijo, concluye Aciprensa.