La cotización de Mapfre se ha desplomado este lunes un 3,74%, hasta los 2,47 euros por acción, mientras el Ibex subía un 1,22% y superaba los 9.680 puntos. La aseguradora ha sido, de largo, la peor compañía del índice, tras el anuncio del pasado viernes en el que advirtió del impacto negativo de los tifones en Japón y de los disturbios en Chile en sus cuentas de 2019.

Hablamos de un impacto negativo en el beneficio atribuido de entre 130 y 140 millones de euros, “principalmente vía negocio de reaseguro”, aseguró la compañía. Y no solo en las cuentas de este año. “Este aumento extraordinario de costes obliga a una revisión, actualmente en curso, de los objetivos públicos para el periodo 2019-2021 anunciados en marzo de 2019”, señaló el viernes en el comunicado.

Ahora bien, la aseguradora que preside Antonio Huertas dejó claro que “estos eventos no tienen un impacto significativo en la posición de solvencia y de fortaleza de capital de Mapfre”. En otras palabras, los tifones en Japón y los disturbios en Chile no afectarán al dividendo del ejercicio 2019, cuyo importe será “equivalente al de la distribución de resultados del ejercicio 2018”, afirmó la compañía.

Lo cierto es que los tifones en Japón no son una novedad. En la presentación de resultados de 2018, la aseguradora reconoció que los tifones sufridos durante ese ejercicio tuvieron un impacto negativo en las cuentas de 87,3 millones de euros, que se elevaron hasta los 96,6 millones después de sumar los 9,3 millones de las tormentas en EEUU. En 2019, en lugar de tormentas en EEUU ha habido disturbios en Chile.