Una mujer vietnamita que llegó a ser arrestada y acusada por su supuesta participación en el asesinato de Jim Jong Nam, medio hermano de Kim Jong Un, fue liberada el viernes por las autoridades de Malasia, informó su abogado, informa La Nación.

Doan Thi Huong “fue liberada hacia las 7:20 de la mañana” de la prisión en las afueras de Kuala Lumpur, informó el abogado Hisyam Teh Poh Teik a la AFP.

Luego de un extenso proceso, la joven se declaró culpable de un cargo menor, el de ‘causar lesión’ en el caso de Kim, y así se convirtió en la única persona sancionada por un asesinato que conmovió al mundo. Huong recibió una pena de cárcel que fue reducida y, de acuerdo con su abogado, finalmente salió de prisión para retornar a su casa.

Este año, la joven indonesia Siti Aisyah, también arrestada y procesada por el asesinato, fue liberada y retornó a su país después que los cargos fueron retirados.

Las dos muchachas siempre negaron haber cometido el asesinato, y alegaron que fueron piezas manipuladas por agentes de Corea del Norte, quienes rápidamente habrían abandonado Malasia luego del crimen.

El norcoreano, medio hermano de Kim Jong Un fue rociado con un tóxico y murió pocas horas más tarde

Kim Jong Nam era el hijo mayor del exlíder norcoreano Kim Jong Il y llegó a ser considerado uno de sus probables sucesores en el poder. Sin embargo, en 2003 se asiló el Corea del Sur y pasó a ser un severo crítico del gobierno de Pyongyang.

En febrero de 2017, Kim Jong Nam fue abordado por dos mujeres que pensaban estar grabando un programa de televisión. El norcoreano, medio hermano de Kim Jong Un, fue sin embargo rociado con un tóxico y murió pocas horas más tarde.

Las autoridades divulgaron los videos capturados por cámaras de seguridad en el aeropuerto e identificaron a Huong y Aisyah, que enfrentaron la posibilidad de la pena capital caso sean declaradas culpables.

El gobierno de Corea del Sur, por su parte, acusó a Corea del Norte de organizar el asesinato.

Los gobiernos de Indonesia y Vietnam ejercieron enorme presión sobre Malasia para la liberación de las dos mujeres.

El caso también desató una aguda crisis entre Corea del Norte y Malasia, que hasta ese momento era un discreto aliado de Pyongyang.