En plena pugna entre los asistentes de voz, que están copando el mercado,  y el reconocimiento por parte de Google de que "expertos del lenguaje" contratados por la firma escuchan aproximadamente el 0,2 % de las conversaciones que los usuarios mantienen con su asistente virtual, lo que implica que una parte de esas interacciones no son completamente privadas, vuelve a saltar a escena Facebook, porque La Comisión Federal de Comercio, FTC, ha decidido imponer una multa de aproximadamente 5.000 millones de dólares (4.400 millones de euros) a la compañía por las violaciones sistemáticas por parte de esa red social de la privacidad de sus usuarios. Según la agencia americana de noticias Bloomberg, la multa es la segunda más alta impuesta por la FTC, que es uno de los organismos de defensa de la competencia en Estados Unidos, solo por detrás de la sanción de 10.000 millones de dólares (8.800 millones de euros) a la empresa automovilística alemana Volkswagen en 2017.

La sanción a Facebook todavía no ha sido hecha efectiva, y presumiblemente irá acompañada de una serie de restricciones sobre cómo trata la información personal de sus usuarios, que según la empresa son 2.700 millones de personas en todo el mundo salvo China (donde está prohibida), aunque hay quien considera esta cifra exagerada.

La investigación se inició tras el escándalo de Cambridge Analytica cuando el diario británico The Guardian y el estadounidense The New York Times descubrieron que lo que aprecia una inofensiva app en la web de Facebook había sido, en realidad, un sistema para transmitir información de los usaros de la plataforma a la campaña de Donald Trump sin que aquéllos lo supieran. Sin embargo, la multa se debe a muchas otras instancias en las que Facebook violó los términos de uso con sus usuarios, e incluso los acuerdos a los que había llegado con los reguladores estadounidenses. La compañía también está siendo investigada por las autoridades antimonopolio del Reino Unido y por las de la UE, por este mismo asunto.

Google no es la única que se ha visto afectada por la polémica porque Apple se ha visto forzada a suspender el sistema de walkie-talkie de su Apple Watch o reloj inteligente

La multa se sitúa en el rango más alto de las previsiones de Facebook, y sin embargo no ha dejado contentos a todos. De los cinco miembros de la FTC que votaron la sanción, tres  (todos republicanos) lo hicieron a favor, y dos (demócratas) en contra, presumiblemente porque querían medidas más duras contra la empresa de Mark Zuckerberg

Y a pesar de que los reguladores norteamericanos se han ganado la fama, merecidamente, de ser independientes, la decisión de la FTC, se produce en un momento en el que el presidente Donald Trump ha decidido declarar la guerra a los gigantes tecnológicos. Trump asegura que su administración va a vigilar muy de cerca los monopolios. “No quiero perjudicar a estas empresas (Facebook, Apple, Amazon, Netflix o Google conocidas como las FAANG), sino ayudarlas”

La Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos trabaja en estos momentos en la elaboración de una legislación que ponga fin a lo que muchos consideran “monopolio” de las tecnológicas. Trump ha criticado en numerosas ocasiones a Amazon para acusarle de pagar menos impuestos de los que debe y ha apuntado directamente a Jeff Bezos como creador de noticias falsas a través de The Washington Post, y que además es director ejecutivo de Amazon. Algunos opinan que lo que en realidad ocurre es que estas compañías son “molestas” para Trump por el poder que tienen. El control de los datos en la era en la que la privacidad está en peligro, por el brutal desarrollo de los Over The Top, OTT, ha llevado a estas empresas a convertirse en una de las dianas de la administración estadounidense.

La sanción a Facebook todavía no es efectiva y, presumiblemente, irá acompañada de una serie de restricciones sobre cómo trata la empresa la información personal de sus usuarios

Pero no solo es la Administración republicana de Trump la que ha decidido tomar cartas en el asunto, la demócrata Elizabeth Warren ha llamado a dividir a las grandes tecnológicas. “Estas compañías tendrán prohibido ser propietarias de la ‘plataforma de servicios’ y de cualquier participante en la plataforma. Además, deberán cumplir unos estándares justos, razonables y no discriminatorios ante a sus usuarios”, ha dicho Warren en el Congreso para añadir que  tampoco podrán compartir datos con terceros.

Dicho de otra forma, que Mark Zuckerbeg, fundador de Facebook, no podría ser el propietario de la mensajería, de los pagos y de la red social. Una estrategia que evitaría las situaciones que han provocado la compra de WhatsApp por parte de Facebook o la adquisición de Whole Foods por parte de Amazon. Unas fusiones que Warren no descarta deshacer cambiando la regulación si se convierte en la primera presidenta de Estados Unidos.

También Apple

Google no es la única que se ha visto afectada por una polémica de este tipo porque Apple se ha visto forzada a suspender el sistema de walkie-talkie de su Apple Watch o reloj inteligente. Esta funcionalidad permitía enviar mensajes entre los smartwach de la compañía. Sin embargo, la empresa afincada en Cupertino, ciudad del estado de California, localizó una vulnerabilidad grave en el sistema, que podría provocar que a través de este dispositivo se escuchasen las conversaciones de terceros.

En resumen, las cuatro grandes OTP (over the Top), Google, Apple, Amazon y Facebook se han autoproclamado enemigos de  la intimidad del ciudadano. No sabemos si eso les inquieta mucho,