• La pérdida de la Presidencia del Eurogrupo incide en el ambiente de derrota que reina en Moncloa.
  • El ministro insiste en salir del Gobierno cuando termine la legislatura.
  • Y Alemania sigue tomándonos el pelo: somos los obedientes españolitos a los que se apoya en Moncloa pero se deja caer en privado.
Al final el holandés impronunciable, Jeroen Dijsselbloem, se llevó el gato al agua: reelegido como presidente del Eurogrupo frente al candidato español, Luis de Guindos (ambos, en la imagen). Una muestra de lo que los españoles pintamos en Europa: nada. Somos los fieles aliados de los alemanes, dóciles españolitos que reciben la palmadita de Merkel –único país que anunció su voto favorable a Guindos. Sólo que luego, en votación secreta, la mayoría dio su apoyo al holandés. No pintamos nada en Europa, que nos obligó a un ajuste draconiano y que nos ha ido expulsando de las instituciones. Seguimos siendo los 'dogos' del sur y nuestra influencia en los medios comunicamos es escasísima, muy por debajo de, por ejemplo, Holanda, que cuenta con una población cuatro veces inferior a la de España. Por lo demás, la derrota de Luis de Guindos ha hundido todavía más el ambiente en Moncloa. Ambiente de derrota, con salidas aceleradas de asesores y con la sensación de que Mariano Rajoy será presidente de una sola legislatura. Y en principio, Guindos ya había dicho que abandonaría el Ministerio de Economía en cualquier caso, con Eurogrupo o sin él. A lo mejor no necesita elegir. Eulogio López eulogio@hispanidad.com