La liberalización del AVE en España supondrá la ruptura del monopolio de Renfe pero beneficiará al empleo ferroviario de nuestro país. De hecho, en la planta que Bombardier Transportation (empresa canadiense que acaba de recibir el visto bueno de Bruselas para ser adquirida por la francesa Alstom) tiene en Trápaga (Vizcaya), donde emplea a unas 200 personas de las más de 800 que tiene en España, se fabricarán los sistemas de propulsión y control de los 23 trenes que Ilsa operará aquí en un futuro.

Así lo ha señalado Oscar Vázquez, presidente de Bombardier en nuestro país. Y es que la compañía japonesa Hitachi y Bombardier Transportation se han adjudicado el contrato de 23 trenes de alta velocidad por unos 797 millones de euros para Ilsa. Es decir, para la sociedad formada por Air Nostrum (aerolínea regional perteneciente a Iberia) y Trenitalia (compañía que forma parte del operador ferroviario estatal italiano), que entrará a competir con Renfe en alta velocidad en tres corredores (Madrid-Barcelona, Madrid-Valencia/Alicante y Madrid-Sevilla/Málaga) a partir de marzo de 2022. 

Además, Bombardier tiene entre sus clientes a SNCF, el operador ferroviario francés, que también entrará a competir con Renfe en AVE, pero lo hará en la primavera de 2021. A finales de junio, Bombardier se adjudicó un contrato para fabricar los sistemas de propulsión de 27 trenes regionales para SNCF, que se harán en Trápaga,... y puede que lleguen otros pedidos en el futuro.