El presidente en funciones y candidato del PSOE a volver a serlo, Pedro Sánchez, ha entrado de lleno en campaña electoral anunciado medidas que van a costar un dineral. Y eso que organismos económicos internacionales avisan de nubarrones en la economía mundial.

Por ejemplo, la semana pasada Sánchez aprovechó un mitin en Valencia para anunciar que antes del 10 de noviembre desbloquearía las entregas a cuenta a las comunidades autónomas.

Este lunes, anunciaba que el Gobierno en funciones revalorizará las pensiones conforme al IPC en diciembre.

Ayer, el líder del PSOE anunció una disminución de las peonadas necesarias en Andalucía y Extremadura para acceder al subsidio agrario y hacer frente al “atropello arancelario” de Donald Trump. En esencia se trata de que el acceso a esta ayuda del Estado sea percibida acreditando menos jornadas de trabajo al año.

También ha prometido continuar incrementando el próximo año el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), hasta el 60% del salario medio a final de legislatura (unos 1.200 euros), y derogar los aspectos más lesivos de la reforma laboral.

El Economista calcula que las promesas sociales y electorales de Sánchez costarán 15.400 millones de euros.

Insistimos: en un contexto de desaceleración mundial y con la deuda de España disparada…