La tasa de morosidad bancaria deja atrás la cota del 6%, un paso más en el saneamiento del sector, clave para rebajar las provisiones y relejar las exigencias del BCE en recursos propios. En concreto, según los datos del Banco de España publicados este viernes, cerró 2018 en el 5,82%, frente al 6% de noviembre y el 7,79% del cierre de 2017. Sigue, no obstante, por encima de la media europea, ya que a finales de 2017, según los datos del Banco Central, estaba en el 5%.

La tasa de morosidad se sitúa en el nivel más bajo de los últimos diez años

Se trata del nivel más bajo desde 2009 en los préstamos dudosos concedidos en España por los bancos, cajas y cooperativas de crédito a los particulares y las empresas. Se sitúa en 70.156 millones de euros, frente a los 73.507 de noviembre y los 97.692 de diciembre de 2017, cuando hace diez años estaba en 172.403.

En 2012 y 2013, por ejemplo, los créditos dudosos sumaban 167.468, por debajo de 2007, y 197.235 millones, por encima, respectivamente. Ese último año registró la cuota más elevada, el 13,6%. Desde entonces ha ido bajando y dejó atrás el nivel del 7% en marzo pasado.