Pedro Sánchez y su ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, solo aciertan cuando rectifican. Querían dañar a los autónomos, esos señores que se buscan su propio cocido y se pagan su propio sueldo, emprendedores por naturaleza que se plantean la siguiente ecuación: prefiero ganar mi propio sueldo, aunque tenga menos subvenciones públicas y menos pensión futura. A cambio, cotizan menos que lo que cotizan empresario y trabajador (en proporción 75/25) por el asalariado.

A la izquierda no le gustan los autónomos, que no dejan de ser pequeños empresarios. Pero, al final, ha tenido que ceder. Por eso, la Seguridad Social ha rectificado: tras un acuerdo con la Asociación de Autónomos, ATA, las cuotas de los autónomos solo subirán 5 euros al mes y no 50, como estaba previsto.