En la Comisión de Fomento sobre los Presupuestos, se ha colado irremediablemente el tema de la huelga del taxi, que vive su octavo día en Madrid. Pedro Saura, ‘número dos’ de Fomento, ha insistido en la postura defendida por su jefe, el ministro José Luis Ábalos: la patata caliente está en manos del presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, pero le exige una solución ya.

El secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda ha subrayado que la movilidad urbana compete “y tiene que ser gestionada” por las administradores locales y autonómicas, como sucede en Europa. Y como era de esperar, ha aprovechado para criticar al Gobierno madrileño, concretamente, su “desidia e irresponsabilidad” por no haber entrado a regular el sector de los VTC, a pesar de que el pasado septiembre, el Gobierno central aprobó el Real Decreto Ley que habilita a las autonomías a hacerlo. "Estaba en lo suyo”, ha señalado Saura, refiriendo “el lío que el PP de Madrid tenía para elegir candidatos” a las próximas elecciones. Pero ahora ha exigido a Garrido “ponerse las pilas” y solucionar el conflicto entre el taxi y los VTC.

Unidos Podemos llama a adoptar el ejemplo de Cataluña, PP critica la "cobardía política" del Gobierno y Ciudadanos subraya que quitarse la patata caliente ha multiplicado el problema

Desde Unidos Podemos, Félix Alonso Cantorné, ha llamado a adoptar el ejemplo de Cataluña, pero Madrid quiere llegar a un pacto con los taxistas distinto: rechazala precontratación y de hecho, el pasado viernes, Comunidad y Ayuntamiento propusieron regular en función de una distancia mínima. Mientras, en el PP, Miguel Barrachina ha criticado la “cobardía política” del Ejecutivo y al portavoz de Ciudadanos, Fernando Navarro, le “alarma que haya asumido el discurso de Mayoral (en referencia al diputado podemita Rafa Mayoral) de enfrentamiento -de un lado, la gente y de otro, los buitres- y ha subrayado que “quitarse la patata caliente ha multiplicado el problema”.

Paralelamente, los taxistas -que han sido desalojados del Paseo de la Castellana por Policía Municipal, Policía Nacional y grúas municipales- se han concentrado en la calle Génova, ante la sede del PP, gritando: “corruptos” y “Garrido, dimisión”. Una movilización que ha llegado a la Puerta del Sol en la tarde. La secretaria de Estado de Seguridad, Ana Botella Gómez, ha apoyado la actuación del desalojo de Castellana porque los taxistas “no pueden poner la ciudad patas arriba ni secuestrar a la ciudadanía”, aunque “tienen derecho a manifestarse”. Pero Tito Álvarez, líder de los taxistas de Barcelona, ha optado por liarla en Madrid cargando contra el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska: “cómo puede ser que un ministro de izquierdas y que es gay, mande aquí a la Policía a reprimir al pueblo, porque lo que está pasando aquí es represión total”. Álvarez debería aclarar si considera que reprime debido a su condición de socialista o a la sexual... aunque ya se ha ganado las críticas del PSOE. 

Por su parte, los VTC siguen protestando en Barcelona por el decreto que exige la precontratación: continúan ocupando la avenida Diagonal y han celebrado una marcha a pie hasta la Conselleria de Territorio. Pero en la capital, también se quieren hacer notar: el próximo martes, harán una manifestación ante la sede de Podemos (situada en la calle Princesa), bajo el lema “Somos trabajadores, no multinacionales” para visibilizar que “son trabajadores que cotizan en España y quieren seguir trabajando sin miedo”. Y el partido de Pablo Iglesias ha reaccionado a través de Twitter

El secretario general de Transportes de UGT Madrid, Antonio Oviedo, ha destacado que en Madrid trabajan 9.000 personas en el sector de los VTC, muchos de ellos desde hace una década. Entre estos, gran parte son conductores-propietarios, pero también hay otros que trabajan para empresas que se han hecho con licencias: “tenemos una franja de edad que no estamos abiertos al mercado laboral y hemos encontrado en las VTC nuestro medio de vida, ha señalado Francisco Antón, conductor de VTC; otro, Arnaldo Rodríguez, ha subrayado que pertenece a una “empresa que desde el primer día he tenido una información, formación, contrato indefinido, trabajo de lunes a viernes, tengo vacaciones pagadas y no entiendo que se pretende demonizar a este sector.