En Honduras, miles de partidarios del presidente Juan Orlando Hernández se congregaron para respaldar al mandatario, ante las acusaciones de excapos de la droga de que habría recibido dinero del narco para las campañas políticas que lo llevaron al poder. Esas acusaciones fueron realizadas en un juicio a su hermano menor, detenido en Estados Unidos, recoge Reuters.

Por contra, cientos de personas marchaban el miércoles en la capital de Honduras, exigiendo la renuncia de Hernández.

El segundo período presidencial de Hernández, que arrancó en enero de 2018 tras ganar por apenas 1.5 puntos porcentuales, está siendo ensombrecido por protestas periódicas, denuncias de fraude electoral y violación a la Constitución que prohíbe la reelección. La oposición le ha pedido que dé un paso al lado.

Hernández volvió a asegurar que el juicio contra su hermano es usado por narcos e incluso expolicías que fueron extraditados a Estados Unidos

Poco antes, Hernández volvió a asegurar que el juicio contra su hermano es usado por narcos e incluso expolicías que fueron extraditados a Estados Unidos durante su gobierno para vengarse de él y de funcionarios que los persiguieron.

“El presidente no es responsable de lo que ha hecho su hermano. Él ha luchado y sigue luchando contra los criminales y narcotraficantes que ahora lo acusan”, dijo Marta Izaguirre, una universitaria de 25 años en la concentración oficialista.

La semana pasada se inició en Manhattan un juicio contra el hermano del mandatario, Juan Antonio “Tony” Hernández. Según los alegatos, “Tony” traficó durante años toneladas de cocaína a Estados Unidos bajo la protección de su hermano. Incluso, el menor de los Hernández recibió personalmente un soborno para el mandatario del narco mexicano “El Chapo” Guzmán.

El gobernante admitió en 2015 que en su primera campaña presidencial recibió dinero de empresas vinculadas a un enorme escándalo de corrupción en el país, pero aseguró desconocía el origen de los recursos.