El presidente interino venezolano, Juan Guaidó, regresó ayer lunes a Venezuela pese a las amenazas del régimen del dictador Nicolás Maduro de detenerlo por haber burlado una supuesta prohibición judicial de salida del país, informa BioBioChile.

Acompañado de su esposa, el opositor, reconocido por más de 50 países como presidente interino de Venezuela, llegó al mediodía en un vuelo comercial desde Bogotá, vía Panamá, al aeropuerto de Maiquetía, a 20 kilómetros de Caracas, donde lo esperaban embajadores de países europeos e iberoamericanos.

En el vuelo, Guaidó se dirigió a quienes le acompañaban en el avión: “Si la dictadura se atreve a secuestrarme será el último error que cometa”. “Estamos muy cerca de la libertad”. “No estamos solos, el mundo está con nosotros, Dios está con nosotros y con Venezuela”. “Vamos a recuperar nuestra democracia, nuestra libertad al servicio de nuestro país”. “Vamos bien porque vamos todos juntos”. “¡Sí se puede!”, respondieron los pasajeros.

Mogherini advirtió que cualquier medida que ponga “en riesgo la libertad, seguridad o integridad personal” de Guaidó sería “una gran escalada de tensiones”

Apenas llegó a Venezuela, el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, advirtió que “cualquier amenaza, violencia o intimidación contra él no va ser tolerada y se va a encontrar con una respuesta rápida”. “El riesgo de arresto sigue siendo muy real para Guaidó. El régimen de Maduro ha perfeccionado la burocratización de la represión”, dijo el senador estadounidense Marco Rubio, al advertir que aún puede ser detenido cuando esté sin prensa, diplomáticos o partidiarios a su alrededor.

La representante de la Unión Europea, Federica Mogherini, advirtió que cualquier medida que ponga “en riesgo la libertad, seguridad o integridad personal” de Guaidó sería “una gran escalada de tensiones”.

Y mientras se dirime el futuro del país en clave política, la pobreza en Venezuela se agrava. La ‘Encuesta de Condiciones de Vida 2018’ de Encovi (proyecto conjunto de las Universidades Central, Católica Andrés Bello y Simón Bolívar) muestra cifras alarmantes: la pobreza creció 10% en tres años, un 90% de los venezolanos no tienen ingresos suficientes para comprar alimentos y en el país ahora la esperanza de vida es 3,5 años más corta.

Apenas la mitad de los menores escolarizados asiste regularmente a clases y se registra un rezago escolar en niños y adolescentes

“En los últimos tres años la pobreza multidimensional creció 10 puntos y en 2018 alcanzó a la mitad de los hogares (51%), mientras 80% de los hogares presenta riesgo de inseguridad alimentaria, debido a que 90% de la población no tiene ingresos suficientes para comprar alimentos”, dijo la directora del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la UCAB y coordinadora de la Encovi, Anitza Freitez, en un evento el 27 de febrero para presentar los resultados del sondeo, recoge CNN.

La inseguridad alimentaria en el país tiene un efecto en las condiciones de vida de los venezolanos, en su expectativa de vida y en la salud de sus niños. “Venezuela perdió 3,5 años en la esperanza de vida al nacer, algo asociado a las condiciones de desarrollo y bienestar de la población”, dijo Freitez. “Solamente los países de la federación rusa durante la crisis de disolución de la Unión Soviética o Camboya luego de la guerra tuvieron una situación similar, lo que indica cuan grave es la situación”.

Encovi también alerta por la situación en la educación: hay pérdida de cobertura educativa, apenas la mitad de los menores escolarizados asiste regularmente a clases y se registra un rezago escolar en niños y adolescentes. Esto también tiene correlación por la escasez y el difícil acceso a servicios públicos.