• Eso supone 1.500 millones de euros de ahorro para los contribuyentes.
  • Se emplea la retención del 15% para todos los profesionales (incluidos aquellos con ingresos superiores a los 15.000 euros).
  • Eso sí, aún con las dos rebajas de 2015 no se equilibra el subidón del 1 de enero de 2012.
  • Habrá Presupuestos Generales para 2016. Ergo, no habrá elecciones en septiembre.
  • "Vamos a hablar con todos y de todo". Eso sí, con los católicos no. No habrá cambios en materia de principios. Rajoy es esclavo de su pasado… y de su cobardía.
Rajoy (en la imagen) citó en su discurso, durante el vigésimo noveno aniversario del económico Expansión, a Cánovas del Castillo: "la política es el arte de aplicar aquella parte el ideal que las circunstancias hacen posible". ¿Posibilismo? ¡No! Rajoy quería recuperar la iniciativa y, de inmediato. Soltó la bomba: adelanta al 1 de julio lo previsto para el próximo 1 de enero: la segunda reducción del IRPF, es decir, para que los españoles lo noten ya en la nómina de julio. Bien, pero recuerden que hablamos de Rajoy: es decir, aún con la doble reducción (1 de enero de 2015-1 de julio de 2015) aún no compensamos el subidón del IRPF del 1 de enero de 2012, nada más llegar el PP al poder. Es decir, que estamos hablando de un partido presuntamente liberal… que aumenta la carga fiscal de los españoles. A Aznar no le va a resultar suficiente. Y más: Rajoy asegura que todos los profesionales (también los que superen los 15.000 euros de ingresos) podrán aplicarse la retención del 15%. Otra golosina para que la saboreen durante seis meses… antes de ir a votar. Un nuevo alarde de triunfalismo -ya hemos perdido la cuenta de cuántos van-: ha vuelto a elevar la previsión de crecimiento para este año, que pasa desde el 2,9% al 3,3%. Sin embargo, para 2016 es algo más prudente, pues no sabe si seguirá en La Moncloa, y sólo eleva la previsión una décima (del 2,9% al 3%). Cifras que se incluirán en la revisión del cuadro macroeconómico que tendrá lugar este mes. No adelantará elecciones como le pedía Esperanza Aguirre. Al menos, eso hay que deducir de su promesa de gobernar hasta el último día y de presentar los Presupuestos Generales del Estado para 2016, que deben estar en el Congreso el 30 de septiembre. A lo mejor tenemos que volver a pensar en el 13 de diciembre como día de elecciones generales. Y un nuevo talante, sí señor: "Hablaremos con todos y de todo". Sí, pero seguramente no va a hablar con los católicos, porque lo cierto es que en materia de principios Rajoy es esclavo de sus pasados recientes. Desde luego, no ha hablado de retomar la reforma del aborto (que era una miseria, pero era un símbolo). Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com