• Ahora el modelo es Wells Fargo: el gran banco USA que no quiso salir al mundo.
  • BBVA ha fracasado en su proceso de internacionalización con la excepción de Bancomer y el Santander Reino Unido aún vale menos ahora que lo que costó en su día.
  • Caixabank sólo quiere controlar en Portugal. El resto (Austria, USA, o Francia) quedarán como participaciones financieras.
  • Sabadell es la excepción con la compra de TSB y el Popular comprará servicios, antes que bancos.
  • Y si surge una oportunidad, el consenso es: mercados grandes, cuotas grandes y control total.
Es un giro copernicano. Hasta ahora nos habían contado que la solución a los problemas de la banca española era la internacionalización: diversificar el riesgo, etc. Pues bien, ahora nos dicen lo contrario: la banca española no quiere saber nada de internacionalización. Prefiere quedarse en casa y, fuera, sólo mantener. Entendámonos, lo que se tiene se tiene ya y no se puede abandonar de la noche a la mañana, al menos sin pérdidas. Además, al Santander le ha ido bien en Brasil y no puede prescindir del Reino Unido, mientras que al BBVA le ha ido bien en Bancomer (México). Dicho esto, resulta que el Santander Reino Unido aún vale menos de lo que costó o que el BBVA ha fracasado en Turquía, Estados Unidos, etc. Ahora, el modelo es Wells Fargo, el banco norteamericano que no quiso crecer y que se ha convertido en el modelo a seguir. Tuvo claro que lo suyo era el mercado norteamericano y la banca universal, preferentemente doméstica, y ahora es el banco ejemplar de Estados Unidos. Caixabank tampoco quiere jugar a otros países. Salvo Portugal, que no es tan fácil dejarlo porque ya se está, con un 45% del capital. Lo de Inbursa, Boursorama o Erste Bank siguen siendo eso: participaciones financieras. Incluso el Sabadell, el último en protagonizar una compra internacional, TSB, se lo va a tomar con calma en el Reino Unido. Y el Popular sólo opta por Portugal y por participaciones minoritarias fáciles de encajar, o por la compra de divisiones y negocios, no de marcas. No sólo eso: hablamos de un consenso sobre la internacionalización y sobre la manera de internacionalizarse. Por ejemplo, se buscan mercados grandes, cuotas grandes y control total. No nos vale un banco en un mercado grande como USA porque no representa nada en el conjunto. No nos vale un banco con una gran cuota en un país pequeño porque eso significa tener al regulador encima siempre y para un negocio que no aporta mucho a tu balance global. Y tampoco sirve un banco con cuota en un mercado grande si no lo controlas. Conclusión: quédate en casa. Valoren con esmero esta conclusión de consenso porque se han necesitado muchas bofetadas para llegar hasta ella. Eulogio López eulogio@hispanidad.com