• ¿Dónde está el atractivo de la entidad? En los créditos fiscales.
  • Pero ni aún así logra despertar el suficiente interés.
  • Las cláusulas suelo pueden acabar con el histórico banquero.
  • Ceiss. El Banco de España advierte a Medel: lo adquirido no se devuelve.
Braulio Medel (en la imagen) cedió la presidencia de Unicaja, en junio de este año, a Manuel Azuaga Moreno, hasta entonces consejero delegado y vicepresidente de la entidad. Se cerraban así 25 años de historia de Unicaja, aunque sólo en teoría. Y es que Medel sigue enredando desde el puesto de presidente de la fundación bancaria, propietaria del 90,8% del banco. No en vano, don Braulio es considerado un hombre correoso donde los haya y el único que miente a su médico, según el presidente de la Fundación Cajasol, Antonio Pulido. Concretamente, y ante un cierre de ejercicio complicado, Medel, que ya intentó colocar la entidad al Popular en verano, está ofreciendo el banco a todo el sector. No es fácil y las cláusulas suelo tampoco ayudan. Actualmente, Unicaja, que no tienen ladrillo tóxico pero sí exceso de cláusulas suelo -tiene hipotecas por 4.500 millones de euros-, tendrá que provisionar 150 millones adicionales a los 140 millones ya previstos. En cualquier caso, que nadie piense que va a devolver el dinero de manera automática. Siguiendo la máxima de Medel, "si es discutible, es recurrible", Unicaja sólo lo hará "en los supuestos en los que se determine judicialmente la nulidad de la cláusula", señaló la entidad el pasado día 21. Por cierto, es el propio Medel el que está forzando el balance en busca de una fusión obligada. Cuanto peor pinte el panorama, más presión para que Economía y el Banco de España busquen posibles interesados. Sea como fuere, ¿dónde está el atractivo de Unicaja de cara a una fusión? En los créditos fiscales. Ahora bien, ni siquiera así ha logrado Medel despertar el interés de los potenciales candidatos, lo que da una idea de cómo está el sector. En cualquier caso, no será fácil que suceda -hablamos de fusión- por cuanto una de las condiciones que ha puesto Medel es mantenerse en la cúpula de la entidad resultante. ¿Que ya es muy mayor? Nada de eso. Hasta septiembre de 2017 no cumplirá los 70 años. Todo un futuro por delante. No opinan lo mismo en el Banco de España, donde están hartos del histórico dirigente andaluz porque siempre está pidiendo. Por ejemplo, compró Ceiss con 'irresponsabilidad ilimitada', esto es, si gano me aprovecho de la ganancia pero si pierdo, no te conozco. Pues bien, como la digestión se estaba haciendo muy pesada, el bueno de Medel quiso fisionar la antigua Caja España, a lo que el Banco de España le advirtió: lo adquirido no se devuelve. Además, ¿qué pasaría con las ayudas recibidas? Así está el panorama. Y como la vida sigue su curso, a don Braulio no le ha quedado más remedio que vender la joya de la corona, esto es, la participación de Unicaja en Iberdrola, de la que Medel es miembro del Consejo de Administración. De hecho, renovó su cargo el pasado mes de junio, al tiempo que entregaba la presidencia de Unicaja Banco a Azuaga. Curiosidad: Medel cobra más de Iberdrola que de Unicaja. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com