• Los empleos en la economía sumergida generan en torno al 11% de PIB.
  • En el último año, el número de empleos fraudulentos descubiertos ha aumentado un 62,2%, hasta 2.589.
  • La Inspección de Trabajo ha emprendido 20.494 actuaciones, pero se sólo se han resuelto 13.012.

Un grano en el desierto, pero algo es algo. El buzón de lucha contra el fraude laboral ha conseguido que afloren 4.181 empleos sumergidos en dos años. No es mucho si tenemos en cuenta que en España hay 1,8 millones de trabajadores sumergidos y que esa cifra de empleos en la llamada economía B podría estar generando en torno al 11% de PIB. Son al menos los cálculos que elaboró a finales de 2014 el Consejo Empresarial para la Competitividad (CEC). El Gobierno puso en marcha hace justo dos años, en agosto de 2013, el buzón de lucha contra el fraude laboral y a la Seguridad Social. Y el Ministerio de Empleo ha informado este jueves de los frutos cosechados con esa iniciativa. Siempre es una buena noticia, pero no parar tirar cohetes. Ya saben cómo funciona ese buzón, habilitado en la web del ministerio que dirige Fátima Báñez, que no estuvo exento de polémica por aquello de las connotaciones negativas de la delación. El ciudadano notifica las conductas fraudulentas y la Inspección de Trabajo de la Seguridad Social hace el resto: investigar. Del único que nunca se sabrá nada es del denunciante por la garantía de confidencialidad. Pues bien, con este método se han aflorado en el último año 2.589 de esos empleos fraudulentos, un 62,6% más que en el año anterior. Y desde 2013 se han liquidado cuotas a la Seguridad Social por valor de 4,6 millones de euros y las multas que se han puesto a las empresas infractoras ascienden a 12,7 millones. No son dato, como decía, para tirar cohetes y al mismo tiempo, también, algo es algo. La Inspección de Trabajo ha emprendido 20.494 actuaciones de las cuales se han resuelto 13.012. Mariano Tomás mariano@hispanidad.com