• Alentado por Obama, Rajoy rompe la baraja con Maduro.
  • Y no olvidemos que la Casa Blanca espera y alienta un golpe de Estado en Venezuela. O mejor, un autogolpe.
  • La verdad es que España se ha convertido en una colonia de Washington contra su nuevo enemigo hispano.
  • El problema de la actitud de Moncloa es que el chavismo no expropiará al Gobierno español ni al PP, sino a las empresas españolas presentes en aquel país.

Enfrentamiento máximo entre España y Venezuela. Parecemos una colonia de Estados Unidos, porque España no ha buscado este enfrentamiento con el régimen bolivariano de Caracas. Ha sido Barack Obama quien ha considerado a Venezuela un peligro para la seguridad de los Estados Unidos, frase solemne que ha hecho pensar a algunos servicios de inteligencia occidentales si no estará preparando Obama una invasión preventiva y que, encima, ha justificado al majadero de Nicolás Maduro para sacar el ejército a la calle, amén de sus peligrosos milicianos y a gobernar por decreto.

En cualquier caso, el miedo a una ruptura con Venezuela consiste en la venganza -por ahora amenaza explícita- de que Maduro atente contra los intereses económicos de España, es decir, contra las empresas españolas. Ya hemos aprendido de YPF en Argentina.

Por eso, la consigna en Moncloa es "si nos expropian que nos expropien". Claro que no expropian al PP, ni al Gobierno, ni a las instituciones, sino a las empresas españolas allí presentes: Telefónica, Repsol, Mapfre, etc.

Es igual, Mariano Rajoy (en la imagen) ha decidido romper la baraja. Es cierto que con un Maduro empeñado en el eje Miami-Bogotá-Madrid y demás sandeces revolucionarias y con Podemos incordiando en España, era la hora de romper, pero el haberlo hecho al rebufo de Obama no dice mucho bueno del país que es origen de la Hispanidad.

No olvidemos que Obama no se atreve con el fanatismo islámico sino por vía indirecta, como proveedor de armas y presionador diplomático. Pero a lo mejor sí se atreve con Venezuela.

Por ahora, dicen en Moncloa, los norteamericanos no piensan en una invasión, que incendiaría Iberoamérica. Piensan en un golpe de Estado, aún mejor, en un autogolpe, para encauzar al enloquecido Maduro.

Pero todo ello no deja de plantear un reconcomio en forma de pregunta: ¿qué se nos ha perdido a los españoles en esta guerra entre USA y Venezuela? No somos más que una colonia de Washington frente a su nuevo enemigo… hispano.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com