El presidente de Bolivia, Evo Morales, se encuentra un paso más cerca de su objetivo de intentar permanecer en el poder hasta el año 2025, recoge BBC.

Este martes por la noche, el Tribunal Supremo Electoral de Bolivia (TSE) dio luz verde para que Morales y su actual vicepresidente Álvaro García Linera participen como candidatos por el gobernante Movimiento Al Socialismo en las elecciones primarias que se realizarán en enero de 2019 y en las cuales se escogerán a aquellos que podrán presentarse a las votaciones generales de octubre del próximo año.

El 21 de febrero de 2016, Morales perdió en un referéndum en el que buscaba habilitarse para un cuarto mandato, sin embargo, un año después el Tribunal Constitucional de ese país sentenció que el actual presidente podía seguir buscando la reelección de manera indefinida alegando que era parte de sus "derechos humanos”.

Durante una rueda de prensa en la que no se admitieron preguntas de los periodistas, la presidenta del TSE, María Cristina Choque, leyó una resolución en la que se anunciaban las candidaturas que se encontraban habilitadas, entre las cuales está incluida la del dúo Morales-García Linera.

Es el gobernante boliviano que lleva más tiempo en ejercicio del cargo en toda la historia

Una transición constitucional aprobada en 2009, en la cual se estableció la posibilidad de la reelección presidencial para dos mandatos continuos de cinco años cada uno, le permitió buscar la reelección en 2010 y luego nuevamente en 2014.

En 2016, los partidarios de Morales convocaron un referéndum para modificar la Constitución nuevamente con miras a permitirle buscar un nuevo período en 2019 pero la propuesta fue rechazada por la mayoría de los electores por un estrecho margen.

Pese a ello, el Tribunal Constitucional dictaminó en noviembre de 2017 que el límite de dos periodos para el mandato presidencial constituía una violación a los derechos humanos del gobernante por lo que autorizó a Morales a volverse a postular. Cabe señalar que la mitad de las autoridades de aquel Tribunal Constitucional que habilitó a Morales ahora ocupa cargos en el aparato gubernamental boliviano.

La habilitación de Evo Morales divide a Bolivia de una manera nunca vista

Los adversarios del mandatario boliviano le acusan de querer eternizarse en el poder y señalan que el TSE desconoció los resultados del referendo de 2016.

Los detractores del actual presidente reivindican y promueven la defensa del referéndum que perdió el gobernante en 2016 y alegan que es un mandato popular vinculante y obligatorio.

Desde el bando oficialista, los seguidores de Evo señalan que la victoria del No a la reelección fue por margen muy estrecho (51,3% contra 48,7%) y defienden que el Tribunal Constitucional es la instancia más elevada e inapelable para discernir polémicas en Bolivia.