• Villar Mir llega a un acuerdo con IFM, a través de OHL México, para venderle un 24,99% de su concesionaria.
  • Cumple con las necesidades financieras de su filial y se libra de una ampliación de capital.
  • El grupo encabeza el ranking de crecimiento de la deuda entre las seis grandes constructoras.
  • Y de paso, obtiene los recursos para participar en el plan de infraestructuras del país hispanoamericano.
  • La bolsa le aplaude (sube un 7%) por las mismas razones que le penalizaba: el apalancamiento.

Cualquier decisión que tome OHL, presidida por Villar Mir (en la imagen), para reducir su apalancamiento será bien interpretada por los analistas. No hay que olvidar que el grupo ha pasado de ser la constructora menos endeudada de las seis grandes (ACS, Ferrovial, FCC, Acciona, Sacyr y OHL), a encabezar el ranking en el aumento de ese concepto. Por eso, es bueno que haya alcanzado un acuerdo con IFM Global Infrastructure Fund (IFM) para venderle una participación un 24,99% de Concesionaria Mexiquense por un importe de 513 millones de euros. Ha informado de ello este jueves a la CNMV. Esa concesionaria, que opera 110 kilómetros de carretera de peaje al noreste de México DF, es el principal activo de la empresa de OHL México, su filial en aquel país.

La noticia ha tenido un impacto inmediato en la bolsa: las acciones se revalorizan más de un 7%. El mercado saluda lo mismo que antes penalizaba: el endeudamiento. No obstante, la operación tiene otras aristas, igualmente interesantes, para OHL México.

Además de cumplir con las necesidades financieras de su filial (más de 250 millones de euros este año), el grupo obtiene los recursos necesarios para participar en el plan de infraestructuras de México. OHL, también hay que tenerlo en cuenta, se libra de tener que inyectar dinero o de una ampliación  de capital.

La situación de endeudamiento ha llevado a más de uno a preguntarse ¿a qué juega Villar Mir? Y es que mientras todas las constructoras emprenden duros procesos de adelgazamiento de la deuda, en OHL, encima, crece casi un 14%. La necesidad de reequilibrar el balance le ha llevado incluso a intentar colocar a Abertis las autopistas mexicanas, del mismo modo que le había comprado las chilenas y brasileñas.

Rafael Esparza

rafael@hispanidad.com