• La vicepresidenta se deja caer por las televisiones y asegura que las uvas están verdes.
  • Mientras, Rajoy ya ha dejado claro a todos sus próximos que será el candidato en las próximas elecciones generales.
  • Si gana se queda y recordará a todos los que están buscando trabajo.
  • Si pierde no dirigirá la transición en el PP, aunque mantendrá el aforamiento parlamentario.
  • Pero lo que nadie puede esperar, tampoco Soraya, es que patrocine a nadie como sucesor, tal y como Aznar hizo con él.
La vicepresidenta primera. Y única, del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría (en la imagen), se plantó la mañana del martes en Cuatro para ser entrevistada. Cuatro representa la intelectualidad progre de Tele 5, que es una emisora progre pero sólo de cintura para abajo. Es decir, Cuatro es una emisora que pone a Mariano Rajoy como no digan dueñas pero que, miren ustedes por donde, a la vicepresidenta ni la toca. Pues bien, se empeñaron los periodistas, cómo son, en preguntarle si quería ser presidente del gobierno y, naturalmente ella dijo que no, que sólo está para don Mariano y para que don Mariano repita como presidente del Gobierno, cosa que tiene bastante difícil. Esto es, que doña Soraya apuró lo de la zorra. Las uvas están verdes porque no las puedo alcanzar. Para entendernos, Marianao Rajoy, a la desesperada, va a intentar repetir como presidente. Para ello necesita no sólo conseguir más escasos que el PSOE sino con uan diferencia suficientemente para que a Pedrito Sánchez 'Maravillas' se le haga más cuesta arriba la creación de un Frente Popular con Podemos y compañía. Ahora bien Rajoy se hará enterrar contra todos sus servidores. Soraya ha soñado toda la legislatura con que Luis Bárcenas supusiera la imputación de Rajoy y quedará ella m limpia de corrupción, como única alternativa posible. Esa posibilidad ya ha pasado. Ahora Rajoy se presentará a las elecciones. Si gana repetirá y se acordará de todos aquellos que no han cerrado filas con él en los momentos difíciles. Y si pierde, Rajoy buscará un aforamiento para irse diluyendo de la vida pública sin pasar por el banquillo. Ahora bien, que nadie espere, tampoco Soraya, que patrocine a su sucesor como Aznar le patrocinó a él. Azara abandonó la Moncloa en lo más alto de sus prestigio, a pesar del 11-M. No es el caso de Mariano Rajoy. De forma justa e injusta, hay muchos líderes del PP que le tiene mucha manía a su líder actual. Tranquila Soraya: ya sabemos que no quieres ser presidenta. Pero no te preocupes: tampoco puedes. Tu momento pasó. Y encima está lo de Rato. Día negro para Soraya. Eulogio López eulogio@hispanidad.com