A bordo del barco de la ONG Open Arms viajan 60 personas de 14 nacionalidades: ocho palestinos, ocho de Sudán del Sur, tres de Mali, cinco sirios, uno de Burkina Faso, otro de Costa de Marfil, cuatro eritreos, ocho egipcios, tres de República Centroafricana, dos de Camerún, dos etíopes, seis libios, ocho de Bangladesh y un guineano.

"No vamos a Barcelona porque sea la mejor decisión, sino porque no hay otra". Así de claro se ha mostrado Óscar Camps, fundador de Proactiva Open Arms, quien ha hablado en Radio Nacional de España (RNE) sobre el hecho de que la ONG española tenga que ir a la Ciudad Condal "con muy poco combustible" para desembarcar a los 60 migrantes rescatados este sábado, recoge RTVE.

Camps ha denunciado la actitud de Malta e Italia. "Nos han cerrado todos los puertos, no nos dejan repostar", ha señalado el fundador de Proactiva Open Arms, quien también ha querido dejar claro que en ningún momento han podido entrar o salir de la isla y que ha criticado la postura que mantiene el ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, que ha vetado a las ONG.

Camps denuncia la actitud de Malta e Italia afirmando que les han cerrado todos los puertos y no les han dejado repostar

"Tenemos que agradecer al Gobierno español de que en tan poco tiempo nos haya podido asignar un puerto de desembarque. No es el lugar óptimo para ir, pero volvemos a casa con muy poco combustible porque no nos queda otra", ha señalado Camps a RNE.

"Estamos atendiendo a estas personas que rescatamos un poco más animados", ha afirmado Camps, para quien "es muy cómodo" atender a ese número de personas, acostumbrados a llevar en la nave a 500.

En cualquier caso, para poner el asunto en su raíl, sólo el domingo, Salvamento Marítimo recogió -salvó- a 160 personas en el Estrecho. Pero las cámaras de TV no siguen a Salvamento Marítimo o a los buques de la Armada que salvan emigrantes.

Sólo el domingo, Salvamento Marítimo rescató a 160 personas en el Estrecho

Por su parte, el primer ministro italiano Matteo Salvini acusa a las ONG que salvan inmigrantes en el Mediterráneo de fomentar el tráfico de seres humanos. El Gobierno de Italia ha decidido prohibir el atraque de los barcos de estas organizaciones en territorio italiano, ni siquiera para aprovisionarse.

De hecho, el Ministerio de Infraestructuras transalpino anunció este viernes que prohibía el acceso a uno de los puertos del país al barco Astral, el otro con el que opera Proactiva, "por motivos de orden público", después de que se solicitara permiso para repostar y relevar su tripulación.

Una política similar ha impulsado Malta, que impedirá que las ONG usen sus servicios portuarios hasta que se aclare el caso de la nave de la organización alemana Lifeline, a la que permitió el acceso el pasado miércoles con 233 inmigrantes tras seis días a la deriva.