• La CNMV aprueba la opa de Atlantia.
  • Lo cual significa que ACS tiene 12 días para presentar su contra opa.
  • El Gobierno también advierte a Castellucci: es mala práctica introducir la política en los negocios.
  • Y la chulería italiana vuelve a relucir: Atlantia asegura que no necesita autorización de Moncloa.
  • De postre, Abertis traslada su sede social desde Barcelona a Madrid.
La CNMV ha dado este lunes el visto bueno a la opa de Atlantia sobre Abertis. Oferta que los italianos presentaron el 15 de junio y que fue admitida a trámite tres semanas después, el 3 de julio. Lo que ofrecen los Benetton: un precio en efectivo de 16,50 euros por acción, lo que implica valorar la compañía en más de 16.200 millones de euros. Este lunes, la cotización de Abertis ronda los 17,29 euros por título y su capitalización bursátil supera los 16.800 millones. Más allá de Atlantia, lo que implica la autorización de la CNMV es que ACS tiene 12 días para presentar su contra opa. La empresa que preside Florentino Pérez lleva semanas preparando su oferta o, dicho de otra manera, buscando socios (fondos) que le permitan lanzarla. Se trata de comprar una empresa que vale casi el doble (ACS capitaliza 9.745 millones). Y mucho cuidado, porque la empresa española no podrá mejorar la oferta que lance. Sólo tiene una bala, mientras que los italianos pueden disparar cuantas veces quieran. A todo esto, el máximo accionista de Abertis, Criteria, que aún no ha se ha pronunciado, ha recibido la última advertencia del Gobierno: la compañía no debe acabar en manos de los italianos. No por nada, sino porque se trata de dos sectores -autopistas y telecomunicaciones- estratégicos para España. En este sentido, el Ejecutivo también ha advertido a Giovanni Castellucci: es mala práctica introducir la política en los negocios. "Estoy seguro que la polémica nacionalista no influirá en la decisión de una autoridad independiente", aseguró el consejero delegado de Atlantia. Castellucci no aclaró si hablaba de Cataluña o de las reticencias mostradas por el Gobierno a que la italiana se hiciera con la empresa española. Una chulería que los italianos han vuelto a mostrar este lunes. "A juicio de Atlantia no es necesaria autorización en España en relación con la otra de control directa de Abertis e indirecta de su grupo de sociedades". "En consecuencia, la empresa no ha comunicado la oferta a ninguna autoridad española distinta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores(CNMV)", sentencia la compañía en el folleto de la opa. Curioso, porque fue precisamente el Gobierno italiano el que prohibió la compra de Atlantia (entonces Autostrade) por Abertis en 2006. Y también fue el Ejecutivo italiano el que en su día vetó la compra de Banca Nazionale del Lavoro por el BBVA y de Telecom Italia por Telefónica. De postre, Abertis traslada su sede social desde Barcelona a Madrid. A los italianos no les importa mucho. Pablo Ferrer pablo@hispanidad.com