Donald Trump ha amenazado a España con sanciones por su supuesto apoyo financiero al Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro. "Ya veremos, ya veremos", decía a los periodistas que le preguntaron por esa posibilidad, antes de despedirse y dirigirse hacia su helicóptero le llevaría al estado de Misisipi este fin de semana.

Sus declaraciones han llegado horas después de que el Gobierno español negara que el Ejecutivo de Trump hubiera llegado a plantear “tales medidas” tras contactar con las autoridades de Estados Unidos a través de la Embajada del país en Madrid.

'Bloomberg' publicaba el jueves que algunos cargos de la Administración estadounidense estaban presionando para imponer estas medidas después de que, en septiembre, varios medios señalasen la posibilidad de que las autoridades de Caracas utilizaran al Banco de España para burlar las sanciones que Estados Unidos había impuesto al país hispanoamericano. El Banco de España negó entonces cualquier irregularidad en el uso de la cuenta del Banco Central de Venezuela y subrayó que la entidad mantenía "controles específicos" sobre todos los movimientos de esa cuenta "para evitar que pueda ser usada con fines irregulares".

Richard Duke habla de dos socialismos en España: el de Felipe González, contrario al régimen de Maduro y prooccidental, y el de Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez que muestra una clara inclinación por la dictaduras neo comunistas

 

 

Las amenazas del Gobierno norteamericano que se producen después, y según ha podido saber Hispanidad de fuentes solventes, de que el embajador, Richard Duke, enviara una serie de informes a la Casa Blanca, relacionados con este asunto, en los que asegura que hay dos socialismos en España: el de Felipe González, contrario al régimen bolivariano de Nicolás Maduro, prooccidental y que siempre ha defendido las buenas relaciones con los Estados Unidos, y el de Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez que muestra una clara inclinación por la dictaduras neo comunistas, como la de Maduro, “de ahí que su socio preferente sea Podemos, vinculado estrechamente con la dictadura de Venezuela”

En concreto y sobre el ex presidente Zapatero y su supuesta ‘mediación neutral’ en Venezuela, ha sido el propio Felipe González el que ha cargado, en más de una ocasión, contra la actuación de ZP para rechazar directamente esa mediación. “El diálogo por el diálogo no tiene sentido”. (...) “No es posible que se hable seriamente de diálogo con el Gobierno de Maduro”, decía González que con especial virulencia acusaba a Rodríguez Zapatero de estar siguiéndole el "engaño" a Nicolás Maduro. En un acto realizado en Buenos Aires, el pasado mes de mayo, aviso de que no aceptaría la excusa que muchos empleaban diciendo que, después de lo ocurrido en los regímenes de Stalin o de Hitler: “no podíamos ni imaginar, nosotros no lo sabíamos, no lo veíamos… ¡Si no lo ven pónganse gafas porque la realidad es evidente!". González reiteraba que estaba "comprometido con la democracia", y que quien violente y achique "el espacio de las libertades" tendría su "oposición militante".

A todo esto hay que añadir, la torpeza que mostraba el presidente en funciones esta misma semana cuando, en un mitin celebrado el pasado miércoles en Barcelona, acusaba a Pablo Casado de actuar como lo hace Trump, “haciendo trampas”….  "Resulta que el PP anda haciendo lo de Trump con estas campaña de noticias falsas diciendo que son votantes de izquierdas que andan disgustados con el PSOE…” 

Acerca de los informes enviados por el embajador, fuentes de Moncloa aclaran: “No somos culpables de lo que haga Rodríguez Zapatero ni de su posición sobre Venezuela"

Así que..,las cosas no andan muy bien entre España y EEUU, hay cierto malestar en la Administración Trump, por no decir cabreo, con Pedro Sánchez. Fuentes monclovitas niegan rotundamente a Hispanidad las acusaciones que vinculan al Gobierno con la financiación de Maduro y explican que “no tienen sentido, que son absurdas". “Prueba de ello es que Leopoldo López acaba de  cumplir seis meses como ‘huesped’ en la embajada española de Venezuela”. Acerca de los informes enviados por el embajador y en los que se habla de la coexistencia de dos corrientes socialistas, las mismas fuentes aclaran: “No somos culpables de lo que haga Rodríguez Zapatero ni de su posición…"  Reconocen, eso sí, que Sánchez no estuvo afortunado en el mitin de Barcelona en un momento delicado para el presidente norteamericano, en pleno proceso de ‘impeachment’. “Fue una torpeza”, nos cuentan desde Moncloa que no obstante quieren dejar claro que no financian al régimen de Maduro "como tampoco somos responsables de lo que haga Zapatero”.

Lo que no se puede negar es que a Donald Trump no le gusta Pedro Sánchez. Se nos viene a la cabeza la imagen del presidente norteamericano, en la cumbre del G20 en Osaka , mandando sentarse a Pedro Sánchez, con un gesto brusco, justo en el momento en el que el presidente se levantaba para saludarlo.  Esto ocurría en junio, justo un mes después de que el Gobierno en funciones ordenara la retirada de la fragata Méndez Núñez del Grupo de Combate del portaaviones nuclear Abraham Lincoln mientras navegaba por el Golfo Pérsico. Una medida que, aunque “temporal” decían desde Defensa en ese momento, causaba un profundo malestar en los Estados Unidos.

No debemos olvidar que el presidente Trump ha exigido siempre a España que aumente su aportación a la defensa de occidente. En junio de 2018, Donald Trump, enviaba una serie de cartas a algunos de sus aliados de la OTAN en las que se quejaba de que no contribuyen lo suficiente a la Alianza Atlántica. 

Según The New York Times, los destinatarios de las cartas fueron, entre otros, la canciller alemana, Angela Merkel; el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, o el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez.

Según los últimos datos publicados por la OTAN, España se mantiene como el segundo país de la Alianza que menos porcentaje de su Producto Interior Bruto (PIB) destina a gasto en defensa, un 0,92%, sólo Luxemburgo invierte menos (0,55%)

En las cartas, Trump constataba que, después de más de un año de quejas en público y en privado para presionar a los países de la OTAN a que aporten el 2 % de su Producto Interior Bruto (PIB) a la defensa común, estos aún no contribuyen lo suficiente,

En la misiva dirigida a Sánchez, Trump le recordaba la promesa de Mariano Rajoy de aumentar la aportación de España a la OTAN. Trump venía a decir, y en resumen, que Sánchez, además de ocuparse del conflicto catalán, debería aumentar el gasto en Defensa.

Según los últimos datos publicados por la OTAN, España se mantiene como el segundo país de la OTAN que menos porcentaje de su Producto Interior Bruto (PIB) destina a gasto en defensa, un 0,92%, sólo Luxemburgo invierte menos (0,55%).

Solo siete países de la Alianza Atlántica cumplirán en 2019 la meta pactada de destinar el 2% del PIB a defensa de aquí al 2024. Se trata de Estados Unidos (3,42%), Grecia (2,24%), Estonia y Reino Unido (2,13% en ambos casos), Rumanía (2,04%), Polonia y Letonia (2,01%), según las previsiones de la OTAN (en pdf).

Se acercan a la meta, Lituania (1,98%), Turquía (1,89%) y Francia (1,84%), mientras que Alemania destinará el 1,36% e Italia el 1,22%. De los grandes países europeos, España es el que menos recursos destina a la Organización.

Y aquí me surge una pregunta, ¿tendrá algo que ver con todo esto que Italia y Grecia, que han aumentado sus aportaciones a la Alianza Atlántica, y que exportan también productos agrícolas a EEUU como España, no se hayan visto afectados por los aranceles de Trump?